Este domingo se realizó la carrera “Patitas a Correr”, organizada por la Dirección General de Ecología, con el propósito de apoyar a los perros resguardados por la Dirección de Protección y Bienestar Animal con tratamientos médicos.

Georgina Vázquez Bracho Hidalgo, directora de Protección y Bienestar Animal, declaró que se tienen bajo resguardo más de 48 perros de todas las edades, desde hace al menos seis meses, pero todos enfrentan la complicación de no poder mantenerse mucho tiempo, principalmente por las medicinas valuadas en miles de pesos.

“Los perros bajo resguardo pueden necesitar toda clase de tratamientos, desde aquellos que son para las pulgas, hasta aquellos para enfermedades causados por garrapatas, como la erliquiosis, así como aquellos para problemas de la piel como sarna, afectaciones en los ojos, entre otras”.

Bracho Hidalgo aclaró que el tratamiento para estas enfermedades puede variar, ya que hay casos que se resuelven con pastillas de aproximadamente 400 pesos, hasta tratamientos que duran más de tres o cuatro meses, los cuales llegan a costar hasta 10 mil pesos.

“Una vez que se alivian, el siguiente paso es darlos en adopción, pero hay casos en los que, por no poder continuar con el tratamiento, se llegan a dormir a los perros, debido a que ya se encuentran muy viejos o enfermos, pero esta no es la primera opción a la que se busca llegar”.

Ante esto, la directora señaló que la carrera “Patitas a Correr”  buscó la concientización ciudadana y el apoyo a estos perros en adopción, a través de donativos de los participantes que incluyeran medicinas, alimentos, productos para la piel, esterilización e higiene.

Alonso Fernández Lemmen, director General de Ecología, señaló que en el evento realizado hoy en Malecón Tajamar, participaron 161 personas y 180 perros, que corrieron alrededor de tres kilómetros, desde el cruce de la calle Uaymil con la avenida Malecón Fonatur, seguida de la Sayil, la calle Yum – Balam, la avenida Nichupté, con finalización en el punto de partida.

“Esta fue la primera edición de la carrera, e incluso se registraron participantes de último minuto, señal de la aceptación ciudadana hacia este tipo de eventos, además de que se contó con un bazar que hizo complemento de vender variedad de artículos para mascotas y sus dueños”.