Nueve de cada 10 comerciantes ambulantes de Chetumal se encuentran endeudados con créditos, usureros, que van desde los 15 mil hasta los 60 mil pesos, por lo que prácticamente se han vuelto impagables.

“Somos cerca de 350 micro comerciantes los que integramos la organización, y casi todos están hasta el cuello con deudas. Lamentablemente muchos han abusado de las aplicaciones de préstamos y organizaciones criminales, como los colombianos “gota a gota”, por lo que sus créditos crecieron hasta tres veces más”, declaró el secretario de la Unión de Comerciantes y Prestadores de Servicios en Chetumal, César Antonio Iuit.

Aclara que por esta razón varios empresarios han terminado por sufrir el hostigamiento de sus acreedores, quienes los amenazan con atacar sus negocios o hasta sus familias si no se ponen al corriente con sus compromisos financieros.

“Obviamente, debido a la difícil situación por la que estamos atravesando, muchos compañeros terminan con estrés, preocupación y pánico de ser víctimas de cobros con métodos que rayan en lo delincuencial, así como la pérdida de sus propiedades o negocios”, declaró.

La pandemia orilló a las empresas a endeudarse

Lamentó que la mayoría comenzó a abusar de estos préstamos desde la cuarentena del Covid-19, cuando la actividad económica se vio paralizada por cerca de un año hasta que por fin se normalizó en el 2021.

Fue entonces cuando los visitaron estos usureros quienes, aprovechándose de su situación, les ofrecieron efectivo para salir de problemas emergentes.

“Y desde entonces arrastran estas deudas. Se podría decir que ya sólo trabajan para pagarles a ellos, pues el que debía 5 mil pesos hoy les debe 30 mil, y el que pidió 20 mil ya le cobran 50 mil. Los compañeros temen denunciar porque los tienen amenazados, así que por eso prefieren continuar largando el problema mientras los meses van corriendo y los intereses terminan por comerlos”, sentenció.

La mayoría de las personas afectadas operan desde la informalidad, lo cual complica su acceso a líneas de financiamiento con la banca tradicional.

Datos de la última Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo señala que en Quintana Roo que 208 mil personas realizan alguna actividad económica dentro del sector informal.