Ambientalistas de Bacalar, Pueblo Mágico, reiteraron la petición de prohibir la operación de motos acuáticas en la Laguna de los Siete Colores, luego de que un turista se impactara con un cocodrilo y le provocara la muerte. 

En una carta dirigida al Gobernador del Estado, solicitaron que este tipo de actividades con uso de motor sean restringidas, pues se tiene registro de por lo menos 27 accidentes. 

“En los últimos meses, algunos prestadores de servicios turísticos comenzaron a rentar motos de agua sin contar con la mínima capacitación para el manejo de estos equipos, aunado al desconocimiento que los usuarios tienen de la fragilidad del ecosistema lagunar, suelen invadir los estromatolitos anclando y caminando sobre ellos”, dice el documento enviado al titular del Ejecutivo. 

La situación es grave en Bacalar, lo que afecta su distintivo “Pueblo Mágico”

Los ambientalistas y organizaciones de la sociedad civil como Agua Clara Ciudadanos por Bacalar o el Consejo Ciudadano y Científico para la Conservación de la Laguna expusieron que dado a la gravedad de la situación y la complejidad en la legislación, es necesaria la intervención del gobernador. 

Buscan que se dicte una normatividad que impida el ingreso de motos de agua a la laguna de Bacalar, ya que impactan negativamente el ecosistema y ponen en riesgo la seguridad de vacacionistas y habitantes.  

“Por el bienestar de la laguna y por ende el socioeconómico de sus habitantes, requerimos que se integre en la actualización de las reglas de operación los lineamientos que prohíban el uso recreacional de las motos de agua, siendo de uso exclusivo para las autoridades que ejercen vigilancia y rescate”, apuntan. 

Refieren que es común que los usuarios de motos de agua no tengan experiencia, por lo que no cumplen con la distancia y medidas de seguridad, necesarias y prioritarias para lanchas, esquiadores y nadadores. 

“Al dar de vueltas, jugar en las olas de la estela, justo en los costados de los esquiadores, colocan en peligro al resto de usuarios”, añade. 

También piden al gobernador, a través de la normativa, designar áreas adicionales para deportes sin uso de motor, priorizando zonas exclusivas para actividades turísticas de navegación con vela y remo, así como apoyar a prestadores de servicios turísticos para que sustituyan los motores de sus lanchas por motores ecológicos de cuatro tiempos.