Movilidad física de personas mayores de 50 años, un freno para su contratación en Cancún
Las empresas tienden a tomar en cuenta a los más jóvenes ya que no padecen aún de enfermedades o dolores.
En la población hay muchas quejas respecto a que no se están empleando a personas mayores de 50 años para el sector turístico y hotelero, si bien no todas las empresas siguen esta tendencia, lo cierto es que las personas de la llamada segunda edad, no encuentran trabajo fácilmente.
Las personas de la segunda edad, que comprende de los 40 a 50 años, reparten gran cantidad de solicitudes de trabajo, y el clásico "luego te llamamos", se repite de manera constante.
Muchos, aunque tienen gran experiencia se sienten disminuidos y discriminados por el tema de la edad, pues uno de los "supuestos" beneficios de Cancún, es que hay oportunidades laborales "para todas las edades".
Sin embargo, en los últimos años principalmente los centros de hospedaje están contratando a personas jóvenes que van de los 18 a los 35 años, aunque no tengan el bagaje de conocimientos que puede tener una persona que ya ha estado en el ámbito laboral por más de 20 años.
Esta situación tiene una razón de ser, porque los departamentos de Recursos Humanos tienen entendido, que si bien tienen mucha experiencia, una importante limitante es su movilidad.
Elsy López coordinadora de recursos humanos de conocido centro de hospedaje, explicó que ya sea por enfermedades crónicas heredadas, o por los llamados "achaques" propios de la edad, ya no son tan ágiles y activos, como cuando eran jóvenes
"Eso quita muchos puntos a la hora de contratarlos, por el tema de la movilidad física, pues no cuentan con la capacidad física al 100 por ciento, como la gente más joven".
Explicó que el ámbito hotelero, requiere rapidez y acción, por parte de sus trabajadores, para atender a los miles de turistas que arriban al destino, por lo que se requiere personal con la condición física ideal, para trabajar.
Sin embargo, dijo que hay puestos donde las personas de esta edad pueden desarrollarse, gracias a la experiencia previa que tienen.
"En muchos casos se les contrata para puestos que no tengan tanta movilidad, ya sea en almacenes, en temas administrativos, con el fin de darles una oportunidad, sin que tengan tanto esfuerzo físico"
Por ejemplo ha habido casos de hombres y mujeres que se han dedicado toda su vida a trabajar como guardias de seguridad, y se les contrata, para checar al personal, en las casetas de ingreso al hotel, o en tareas que no supongan un gran riesgo físico.
Aquí surge otro problema, pues si una persona de la segunda o tercera edad llega a tener un accidente, es responsabilidad de la empresa atenderlo, y muchas veces, estos, no son por acciones del trabajo, sino por la condición física que tienen las personas de la segunda y tercera edad, entre los accidentes que más se han presentado en este segmento son caídas, bajas o subidas de glucosa, dolores físicos, o presión arterial.