Algunas de las unidades de transporte público tipo combi de la capital del Estado, están incumpliendo con las disposiciones sanitarias de operar sólo al 50 por ciento de su capacidad, ya que de lo contrario el servicio de transporte no sería redituable.

Los conductores de estas unidades se justifican al asegurar que llevar la mitad de los pasajeros no les permite obtener ganancias en cada viaje.

“Saca tu cuenta: la gasolina ya subió de precio otra vez. En un solo viaje a Calderitas gastamos casi 60 pesos en combustible. Normalmente, con 15 espacios disponibles, suben 20 o 30 pasajeros a lo largo del camino. Ojo, no todos al mismo tiempo, sino que algunos hacen parada en un punto y bajan en otro. Pero de esta forma, sacabas entre 140 a 210 pesos en cada traslado, cobrando siete pesos de tarifa a cada uno”, menciona don Wilberh García, conductor de combi de la capital.

Sin embargo, con las nuevas disposiciones sanitarias contra el Covid-19, solo pueden operar al 50 por ciento de su capacidad.

“Entonces, solo llego a siete pasajeros. Y si me encuentro en el camino a alguno, ya no puedo hacerle parada. En los últimos días, solamente recojo entre siete a 14 pasajeros por viaje, lo que representa entre 49 y 98 pesos de ingresos cada vez”.

“Apenas y sacamos lo del combustible, pero además tenemos que sacar las cuotas, la liquidación, y entonces nos quedamos sin nada. Entendemos la situación del Covid-19, pero tampoco nos conviene trabajar en esta situación”, puntualiza.

Por esta razón, don Wilberth y otros conductores de las combis de la capital del estado se han arriesgado a recibir un mayor número de pasajeros, aunque aún procuran no rebasar el 100 por ciento de la capacidad de su vehículo.

Respecto a la posibilidad de ser sancionados por los inspectores del Instituto de Movilidad, aseguran que prefieren arriesgarse ya que también la población demanda este servicio.