Por negligencia, omisión o corrupción desde la Tesorería municipal, el ayuntamiento de Juanita Obdulia Alonso Marrufo deberá pagar al SAT 48 millones 900 mil pesos, producto de un mal cálculo en el ISR no atendido.

El regidor Pedros Oscar Joaquín Delbouis dio a conocer que en sesión extraordinaria de cabildo y a puerta cerrada, se informó que una deuda de 13 millones se transformó en una que llega casi a los 49.

De acuerdo con la información que proporcionó el concejal al salir de la junta, la deuda data del 2016, cuando Irma Noemi Tun Celis era la Tesorera, puesto que ocupa actualmente en la administración 2021-2024.

“Peor aún, el Sistema de Administración Tributaria (SAT) notificó al gobierno municipal en cuatro ocasiones de la situación y en ninguna respondió a los exhortos para liquidar el adeudo que se convirtió en un crédito fiscal 270% más de lo que era el inicio”, recalcó el cabildero.

En enero de 2023, Irma Noemi Tun fue vinculada a proceso por irregularidades precisamente cometidas en la administración 2016-2018, pero la alcaldesa Juanita Obdulia la defendió y la mantuvo en el cargo pese a que los miembros del cabildo exigieron su cabeza.

En conversación telefónica con el séptimo miembro del Cabildo 2021-2024, este detalló que el asunto inició en el año 2016 cuando se calculó de manera errónea el Impuesto Sobre la Renta (ISR) que se le retuvo a los trabajadores.

El SAT al detectar, la situación notificó al gobierno de Fredy Efrén Marrufo Martín (2013-2016) para que se llevaran a cabo los ajustes correspondientes, por lo que se contestaron las notificaciones.

El trámite alcanzó a la administración de Perla Cecilia Tun Pech, quien puso como tesorera a Irma Noemí Tun (2016-2018), quien ya no le dio seguimiento.

Recalcó que en su gestión como alcalde (2018-2021), se contestó los llamados del SAT y al finalizar su periodo, se entregó el expediente como parte de las carpetas en cada cambio de gobierno.

Sin embargo, nuevamente Tun Celis que es una de los más cercanos colaboradores de Juanita Obdulia Alonso, se desentendió del asunto pese a que el SAT le envió no una, sino cuatro notificaciones para que cubriera el adeudo mediante convenios.

Joaquín Delbouis recordó que la federación tiene una política da apoyos para este tipo de compromisos que, al ser liquidados por los gobiernos estatales o municipales, los reembolsa posteriormente mediante las participaciones federales o mecanismos de otro tipo.

“El ayuntamiento no iba a perder. No le dieron seguimiento y lo siguiente que pasa es que el SAT emite una notificación que recibe el Síndico Bruno Esteban Díaz Solís por un crédito fiscal por 48.9 millones de pesos”, puntualizó.

Calificó de negligencia garrafal de la tesorera que ni siquiera dio argumentos del porqué no se atendieron los requerimientos. “Es un monto sumamente importante, un quebranto muy grande y se le debe fincar responsabilidad”, planteó Pedro Joaquín.

Antes de concluir dijo que al finalizar su gobierno dejó un superávit de casi 14 millones de pesos, con lo que se pudo iniciar los pagos.