Rubén Cruz/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Siete de cada 10 menores de edad que trabajan en los semáforos de la ciudad, provienen de países de Centroamérica como Guatemala, Honduras y El Salvador, el resto son de Chiapas, Oaxaca y Yucatán.

Julio Góngora Martín encargado de despacho de la dirección de la prevención del delito con la participación ciudadana, mencionó que en toda la ciudad se tienen detectados menores extranjeros y nacionales que piden limosna, limpian parabrisas o venden chicles y la mayoría son extranjeros.

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Al respecto dijo que es un tema muy complejo en el que se han realizado operativos en coordinación con la policía preventiva, el DIF municipal, comercio en vía pública, fiscalización y la Fiscalía General del Estado.

A los menores que son sorprendidos vendiendo cualquier producto y a quienes no se les encuentra nada ilegal entre sus pertenencias, el personal de comercio en la vía pública les asegura la mercancía, son trasladados a sus respectivos domicilios.

En caso estar acompañados por algún adulto, estos tienen que presentar la documentación necesaria para acreditar el parentesco o la tutoría del menor y en caso contrario, los chicos son puestos bajo custodia del DIF municipal hasta que algún familiar acredite el parentesco.

“Tenemos casos que nos dicen es mi hijo o sobrino, pero tienen que presentar un documento para que nos comprueben el parentesco y los cuestionamos sobre el motivo por el cual el niño se encuentra laborando en la vía pública, para saber si no es víctima de explotación infantil” aseguró Góngora Martín.

Puntualizó, que en el caso de los menores mexicanos que piden limosna en brazos de sus madres, éstos son de los estados de Chiapas, Oaxaca o Yucatán, y en su mayoría son familias completas que dedican a esta actividad.

El funcionario público enfatizó que hasta el momento no se ha detectado que operen bandas de explotación infantil en Benito Juárez y reconoció que la mayoría de los menores al ser entregados a sus familiares regresan a trabajar a las calles.