Definitivamente los astros han estado en el desarrollo de todas las civilizaciones de nuestro planeta. La siembra, la cosecha y más allá. Confieso que no soy un neófito en el tema, pero tampoco un experto. La ventaja de vivir en esta zona del país nos permite tener una mejor observación de los astros.

El reflejo que crean las grandes ciudades a la bóveda celeste con su luz no permite tener una observación de las estrellas y en cambio aquí es maravilloso y si lo hacemos en una noche de luna nueva, bueno, algo realmente maravilloso. El miércoles pasado a las 2 de la mañana salí a cerrar la puerta de mi terraza y me encontré con una luna espectacular y a su izquierda un pequeño punto rojo sumamente brillante.

Marte como nunca lo había visto y este fenómeno se ha repetido por toda la semana desde que la luna aparece en el horizonte, volviéndose más rojo conforme se hace más noche. Esto me emociona de sobremanera. La existencia de patrones de orientación ampliamente difundidos durante épocas prolongadas y explicables únicamente con el uso de referencias astronómicas sobre el horizonte hizo que los grandes viajes de Colón, Magallanes, Marco Polo y muchos más hayan tenido el éxito que se conoce. También existen estudios sistemáticos de los alineamientos de las arquitecturas maya, egipcia y azteca por mencionar algunas.

Todos los edificios cívicos y ceremoniales fueron orientados, en su mayoría, hacia las salidas y puestas del Sol en ciertas fechas, separadas por intervalos calendáricamente significativos, que sugieren el uso de calendarios observacionales fácilmente manejables y destinados para monitorear el deslizamiento del año calendárico respecto al trópico con la finalidad de facilitar la programación de las actividades agrícolas y algunos rituales incluyendo el resultado que a todos nos consta como el fenómeno de la pirámide de Kukulcan en los equinoccios.

Los invito a que observemos más el cielo, es una actividad gratis y al alcance de todos. También la tecnología nos puede ayudar con algunas aplicaciones para los teléfonos o tabletas que nos dicen en tiempo real que estamos viendo; algo fascinante.

Organicen una noche de estrellas en la playa, les prometo que la pasaran muy bien. Hasta la próxima semana.