El ex candidato de Morena a la alcaldía capitalina y regidor, Laurentino Estrella Chan, criticó la inminente invasión de priistas que pretenden integrarse al partido porque olfatean una inmejorable oportunidad gracias a la fortaleza de Andrés Manuel López Obrador, quien encabeza las encuestas rumbo a la Presidencia de la República en 2018.

Ignorando a propósito la realidad de su partido, el gris regidor aseguró que políticos priistas de peso completo como Eduardo Ovando Martínez o el mismo diputado federal José Luis “Chanito” Toledo, quien por cierto ya está en pleno flirteo con los morenos, no tienen un lugar asegurado en la estructura de Morena y aseguró que, de concretarse su intento de afiliarse al partido de izquierda, estarían excluidos de cualquier candidatura.

Envalentonado, el profesor Laurentino dijo que todos los inmigrantes serán puestos a prueba por la militancia de Morena, por lo que es muy probable que se queden en el intento.

Pero los hechos echan por tierra el discurso romántico del regidor, porque Morena es un partido en el que los militantes fundadores tienen poca voz y menos influencias, mientras los “foráneos” se han hecho del control total de la organización con la venia del propio López Obrador.

De hecho, trascendió que el ex priista Eduardo Ovando Martínez se reunió en privado en la ciudad de México con José Ramón López, hijo de Andrés Manuel asignado a la delicada tarea de coordinar la elección en el Estado de México. Queda claro que El Peje no va a dar el portazo a pesos completos como el chetumaleño Eduardo Ovando.

Ni la base de morenos, ni Laurentino podrán evitar la llegada de refuerzos externos aprobados desde las cúpulas estatal y federal del partido, que no solo están mostrando una gran apertura para recibir figuras de otros partidos, sino que están incluso haciendo visorías y reclutamientos para ser lo más competitivos que sea posible en 2018.

La prueba está que estos morenos con xenofobia política no pudieron impedir, a pesar de sus berrinches, que el ex priista José Luis Pech Várguez fuera ungido como candidato a gobernador el año pasado, ni tampoco fueron obstáculo en su posterior ascenso a la dirigencia estatal.

La llegada de Eduardo Ovando a Morena está casi planchada y seguramente incluye jugosas posiciones para él y su gente, mientras se espera la decisión de “Chanito” Toledo, quien de dejar el PRI tendría la mesa puesta para buscar la alcaldía de Playa del Carmen en el partido de la esperanza.