Esmeralda Espinoza/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La imposición de padres de familia para determinar la profesión que sus hijos deben estudiar al momento de egresar del bachillerato, es un problema que persiste en las escuelas de Cancún. 

José Iván Pérez Amaro, encargado del Departamento de Orientación Educativa del Colegio de Bachilleres de Quintana Roo (Cobaqroo) Cancún I, dijo que los indicadores de la institución arrojan que más del 10 por ciento de alumnos al momento de tomar su decisión, se ven influenciados fuertemente por sus padres a pesar de estar en pleno siglo XXI. 

Entre los casos más recurrentes destacan los de padres que consideran que sus hijos deben seguir sus pasos y estudiar la carrera que ellos estudiaron cuando eran jóvenes, o bien la carrera que estudió el hermano o el tío, continuar con el negocio familiar, o la carrera que consideran idónea para darles mejores beneficios económicos de acuerdo a la zona geográfica en la que radican, es decir estudiar Turismo o Gastronomía , entre otros. 

Explicó que como parte de la labor que realiza el subsistema Colegio de Bachilleres, meses previos a iniciar la solicitud de espacios en las instituciones educativas de nivel superior, imparten pláticas a los jóvenes para evitar estos problemas. 

Indicó que es en los test de orientación vocacional que aplican a estudiantes de quinto semestre, donde identifican los casos de aquellos que temen decidir por su cuenta ya que algunos padres incluso los amenazan con dejarlos solos con los gastos de la escuela si no estudian lo que les ordenan.

El Cobaqroo alberga a más de 18 mil estudiantes, más de la mitad de los matriculados en el estado en nivel bachillerato. Tan sólo en Cancún alrededor de seis mil cursan su educación en los planteles Cancún I, Cancún II, Alfredo V. Bonfil y Cancún IV, de acuerdo con el portal de internet de este subsistema. 

Pérez Amaro aconseja a los jóvenes que elijan la carrera de su interés con el único fin de que desarrollen sus habilidades en el área correcta para que no tengan que verse obligados a desertar del nivel superior ya que cuando empiezan los cursos, se decepcionan y se sienten frustrados por no ser la carrera de su elección.