Pandemia disparó problemas de alcohol entre jóvenes de Quintana Roo
Los servicios de AA atienden a cinco veces más personas de 15 a 18 años.
Los jóvenes de 15 a 18 años de edad en el norte de Quintana Roo usan al menos cinco veces más de los servicios de los grupos de Alcohólicos Anónimos (AA), causado por los conflictos emocionales que dejó la pandemia por Covid-19.
Roberto N, coordinador del comité de información pública de la Central Mexicana de Servicios Generales de Alcohólicos Anónimos, señaló que entre los 120 grupos de AA repartidos entre Benito Juárez, Isla Mujeres, Kantunilkín, y Puerto Morelos llegan al mes 20 jóvenes nuevos.
De estos nuevos casos, la mitad busca tratamiento para sí o para un familiar con adicción al alcohol, y el resto se conforma con preguntar información a pesar de que también pueden sufrir de alcoholismo.
“Anteriormente, quizá llegaban dos, tres, pero ahora ya son 20. Podemos decir que del 2020 para acá”, comentó.
El coordinador agregó que estos jóvenes atienden a las sesiones de AA voluntariamente, y lo que se detecta es que una gran cantidad tiene problemas en su entorno familiar, social, o laboral a causa del alcohol, al punto de generar despidos.
Esta situación es la que se atiende desde el 18 hasta el 24 de septiembre con la Onceava Semana Nacional de AA, en la que se pretenden alcanzar al menos a 10 mil jóvenes repartidos en los 10 distritos que conforman el área Quintana Roo, donde en cada distrito se llevará información a al menos dos escuelas.
En los planteles se buscará dar testimonios de persona a persona, y donde no se puedan llevar pláticas se llevarán módulos con información y cuestionarios para identificar comportamientos del alcoholismo.
“Tenemos compañeros de estos jóvenes que dan testimonio, que también ellos incursionaron en el alcohol, quizás en sus 15 años, que tuvieron consecuencias y que conocieron el programa de Alcohólicos Anónimos, y en base al programa de 12 pasos de recuperación han tenido la oportunidad de cambiar su vida”, explicó.
También tienen contemplados clubes o gimnasios donde se dará la información.
Por otra parte, el entrevistado expresó que como en México está normalizado ver a una persona tomar, incluso en el hogar, a los jóvenes les resulta fácil incursionar en el alcohol, lo cual hacen a escondidas de sus padres o con sus amigos. Pero esto les cambia la vida cuando se producen accidentes, se pierden oportunidades de educación, hay incluso muertes, entre otras adversidades.