Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El personal de la guardería Sol y Luna, ubicada en la Supermanzana 61, declaró ayer que son víctimas por el caso de la niña que falleció en mayo pasado y sus padres los acusaron que fueron los responsables de la muerte de la niña. Acusaron que la mamá de la pequeña nunca fue honesta con ellos, porque nunca les dijo que el señor que iba a buscarla era el padrastro.

María Sebastián Pérez, encargada de la guardería, dijo que el motivo de la conferencia de prensa es para aclarar varios puntos en relación al incidente que se presentó en mayo pasado, donde una niña murió en circunstancias extrañas.

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El caso fue difícil para todos, pero sin embargo lo que quiere aclarar es que también fueron víctimas de unos padres irresponsables, por los detalles que omitió la mamá de la menor, en relación a la niña y al hecho de que el señor que iba a recogerla no era el papá, sino el padrastro.

Reconoció que al principio dijo que la niña había sufrido un “atragantamiento” por el pedazo de plátano que le estaban dando en ese momento, aunque les quedó la duda porque la fruta es bastante digerible.

Pero en el momento de saber los resultados de la necropsia y al saber que no era un “atragantamiento”, sino una convulsión lo que estaba sufriendo la niña, se dio a la tarea de investigar.

Dijo que el día de los hechos, cuando los agentes ministeriales se entrevistan con la mamá de la niña, ahí es cuando se enteró que les dijo que la niña se golpeó en la cabeza, pero no argumentó cómo, ni cuándo, solo que con la puerta del coche.

Además dijo que la niña cuando la traía el padrastro a la guardería, nunca viajaba con asiento de seguridad, siempre la llevaba parada, entonces lo que si está segura que en la guardería no se cayó, ni fue golpeada.

Para finalizar mencionó que no es justo que la mamá esté desprestigiando a la guardería, ya que a raíz de lo sucedido, una de  las educadoras fue tanto su trauma que ya no regresó a trabajar.