Policías, obligados a hacerla de bomberos en Bacalar

Basurero clandestino, pasto de las llamas y al lugar solamente llega un voluntario de Protección Civil; personal de Ecología y Medio ambiente municipal ignora el llamado.

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Los elementos municipales fueron quienes se hicieron cargo del fuego en un vertedero de basura pasando el nuevo cementerio. (Juan Carlos Gómez/SIPSE)
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Juan Carlos Gómez/SIPSE

BACALAR, Q. Roo.- La radio en la Dirección de Seguridad Pública dejó el silencio; el llamado movilizó a dos elementos hacia el camino Bacalar-Nuevo Salamanca a las 12:30 horas. El motivo: un incendio.

 
Pese a que Bacalar cuenta dentro de su organigrama con una Subdirección de la Unidad de Combate a Incendios, fueron los elementos municipales quienes se hicieron cargo del fuego que fue provocado. A un costado del camino, pasando el nuevo cementerio de Bacalar, hay un conocido vertedero de basura, llantas, botellas, e incluso restos de caracol chivita. Además de los policías, acudió Abram Benjamín Montalvo Yamá, un voluntario de Protección Civil: “Nos enteramos mediante el 066, también nos llegan reportes de incendios”.
 
Las carencias para combatir el fuego son varias. “Deberíamos tener, si no se puede un cuerpo de Bomberos, una pipa pequeña siempre con agua para estos casos”, explicó Montalvo Yamá, quien lleva casi dos años como voluntario.
 
Una pipa de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA), proporcionó el agua para sofocar el incendio. “Este desperdicio de agua puede evitarse concientizando a la ciudadanía sobre la quema de basura”.
 
Según Montalvo Yamá, ya le ha pedido a los inspectores de Ecología y Medio Ambiente que propongan el perifoneo para difundir que al menos en los períodos decembrinos no quemen basura.
 
El inspector Ricardo Vázquez Villanueva y el coordinador de Educación Ambiental Romel Gibran Cano Álvarez estaban en el lugar pese a que el primero aseguró al ciudadano Jesús López en días anteriores que no le correspondía a la Dirección de Ecología y Medio Ambiente atender esos casos. “Ya revisé los reglamentos y no nos corresponde”, le explicó el inspector a más de tres meses de haber tomado el cargo del cual no había leído el reglamento.
 
Tampoco pareció sorprenderles el hecho de que existiera un vertedero clandestino de basura, “hay varios vertederos de basura, la gente se ha dedicado a tirar basura, de echo en terrenos baldíos comienza a generarse bastante. Las autoridades ya tienen conocimiento de esto”, dijo Montalvo Yama en el lugar, que también es un camino que conduce hacia una ranchería llamada Ubre Blanca.
 
Se ha tratado el tema de la quema de basura con las autoridades de Ecología y Medio Ambiente, aunque se tienen reportes no ponen las sanciones correspondientes, el problema también toca a Servicios Públicos, pues los vecinos de los alrededores explican que se quema la basura porque el camión recolector no llegá con constancia.“La quema de llantas, plásticos y toallas sanitarias es un verdadero problema para la salud de la gente”, comenta Montalvo Yamá.
 
En el programa federal Agenda desde lo Local, Bacalar se encuentra en categoría amarilla (prácticas municipales están debajo de lo aceptable) respecto al cuidado del aire, y obtuvo categoría roja (prácticas municipales inaceptables) en limpieza y responsabilidad de sus residuos; promoción de la conservación de sus recursos naturales y del cuidado del agua y promoción del cuidado del suelo. Todos esos temas ejemplificados en el incendio de ayer.
 
Los policías municipales se hicieron cargo del incendio. Una hora y casi 20 mil litros de agua después, todo terminó. El vertedero clandestino ha estado desde hace años ahí y ahí continuará, como un riesgo para la salud por la contaminación y un riesgo civil, hasta que autoridades hagan algo al respecto.

 

(Edición: Rafael Pérez)

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