Carlos Castillo/SIPSE
RÍO HONDO, Q. Roo.- El precio del endulzante en el mercado nacional bajará en las próximas semanas ante la sobreproducción de azúcar a nivel nacional, que afectará a todos los productores del país y de Quintana Roo.

Juan Alberto Purata González, secretario de Gestión y Desarrollo sustentable de la Unión Nacional de Cañeros de CNPR, señaló que el precio del azúcar tiene que retomar su nivel, ya que se registraron tres ciclos de bajas precipitadas, lo que generó una disminución de la oferta del azúcar, lo que causó que el precio aumentara.

“Actualmente aunque en Quintan Roo se cumplió con la cuota de exportación, tenemos más de 350 mil toneladas que no se exportaron, dentro de las cuotas que tienen que exportar los ingenios, y se están quedando en el mercado nacional, no sabemos cuánto va caer, eso lo define el mercado”, comentó.

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Precisó que en la presente zafra el precio del azúcar se pagó a 12 mil 600 pesos la tonelada como precio de referencia, pero actualmente el precio fluctúa en 12 mil 620, aunque se sacan tres promedios con base en la venta nacional, la venta a Estados Unidos y la venta a otros países.

“Se saca una media ponderada y se cierra al 30 de septiembre, por lo que para la primera semana de octubre se tiene definido cómo va a quedar el precio de acuerdo con la cámara de la industria azucarera y la Secretaría de Economía, quienes hacen un análisis y se publica en el Diario Oficial de la Federación”, comentó.

Armando Mosqueda Júnes, Secretario de la Unión Local de Productores de Caña de la CNPR, señaló que aun cuando el precio del azúcar baje, como está pronosticado por la sobreoferta, el negocio de la caña en Quintana Roo es uno de los mejores, aparte de que genera la oferta de empleo.

“Como organización exigimos a la cámara de la industria azucarera a través de la Secretaría de Economía, para que obligue a los grupos industriales a que exporten la cuota que les corresponde con base a sus producciones” comentó.

La producción en el país es de alrededor de seis millones de toneladas, de ellas cuatro millones y medio es para el mercado mexicano y el resto se tiene que exportar, con base en el Tratado de Libre Comercio.