Rossy López/SIPSE
TULUM, Q. Roo.- Después que Paul Sánchez Navarro, director del Centro Ecológico de Akumal (CEA), no llegó a la reunión que el gobierno municipal programó a las 10 de la mañana de ayer miércoles, con el objetivo de buscar una solución al conflicto por el camino que es un principal y único punto de acceso a la playa pública, “ventana al mar” que siempre ha estado en disputa.

Los que sí llegaron, en este caso los habitantes del poblado de Akumal y prestadores de servicios turísticos, anunciaron que comenzarán una batalla legal contra estos empresarios extranjeros que quieren prohibir el acceso libre a las familias locales.

Además, dejaron establecido que de ahora en adelante, en caso de que se les niegue la entrada para uso y disfrute del litoral, tomarán medidas más enérgicas como el que asumieron la noche del lunes al bloquear la vía que une a la mancha urbana con zona turística.

Ante la inasistencia de Paul Sánchez Navarro, la reunión para que el gobierno funja como mediador y buscar una solución al problema por la disputa del acceso al mar, los habitantes dejaron establecido que como fuera, así tomando medidas como la que asumieron la noche del pasado lunes, pero además comenzarán con un juicio legal ante las instancias legales correspondientes debido a que en 1975 la empresa Promotora Akumal Caribe, donó al Gobierno del Estado de Quintana Roo,112 mil 013.08 metros cuadrados para formar las calles, accesos al mar, plazas y retornos, creándose en ese entonces el principal acceso a la playa pública.

A decir de uno de los pobladores que estuvo en la reunión de ayer, que se llevó en la Sala de Cabido, en la que no asistió Paúl Sánchez Navarro, el acceso al mar y camino comunal que hoy está en disputa, resultó ser parte de una donación que se realizó en enero de 1975, mismo que fue publicado en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado, donde se precisa cuál sería su destino.

Ante el secretario general del Ayuntamiento, Gilberto Gómez Mora, quien presidió la reunión, los pobladores de Akumal denunciaron la voracidad y despojo que pretende hacer Paul Sánchez Navarro, mismo que está al servicio de Laura Busch, propietaria del  Centro Ecológico de Akumal.