Presagian beneficio a Dragon Mart con Ley Aduanera
Industriales mexicanos advierten que de aprobarse la iniciativa se quitarían controles para combatir el contrabando técnico.
Agencias
CANCÚN, Q.Roo.- Industriales mexicanos advirtieron que el proyecto Dragon Mart, enfocado a incrementar el comercio entre Asia y América, podrían facilitar importaciones mexicanas tanto legales como ilegales si se aprueba una iniciativa del gobierno federal para reformar la Ley Aduanera, publicó El Economista.
“El alcance de los cambios nos preocupa mucho porque quitaría controles para combatir el contrabando técnico”, externó Ismael López, presidente de la Cámara de la Industria del Calzado de Estado de Guanajuato (CICEG).
La reforma aduanera tiene un impacto transversal en todo el país, pero industriales mexicanos tienen puesta la mirada en Dragon Mart porque consideran que ese proyecto representa el mejor ejemplo de los impactos negativos que pueden sufrir si el gobierno concede regulaciones más laxas.
Ubicado en Cancún y con una inversión de 180 millones de dólares, el proyecto consistiría en un complejo para rentar 3 mil 40 locales comerciales, dos bodegas y 722 villas. Sus dueños estiman que participarían 1 mil empresarios expositores, 400 de ellos chinos.
Con ese potencial, Dragon Mart podría convertirse en un recinto fiscalizado estratégico, dado que se quitaría, de aprobarse la iniciativa gubernamental, el requisito de que la ubicación de este régimen sea colindante con las aduanas o las secciones aduaneras, y gozaría así de facilidades fiscales y de despacho.
López cuestionó que la reforma busque permitir la autorización a cualquier interesado de usar “el prevalidador”, una herramienta de control, con información sensible y confidencial, como los precios de las materias primas, para detectar posibles operaciones subvaluadas y mandar alertas.
El gobierno aprobaría, además, realizar directamente el despacho aduanero sólo con la firma electrónica avanzada, dando la opción de prescindir de los agentes aduanales. Con ello, agregó el dirigente, “cualquiera puede hacer una operación de comercio exterior y, luego, desaparecer”.
Las compras externas temporales, como muestras, importaciones de residentes en el extranjero y vehículos usados, que se les gravaría con IVA, se podrían convertir en definitivas y, si se vence el plazo y quedan ilegales en el país, se podrían regularizar.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado consideró que México necesita controles efectivos porque, además de que la producción de China es competitiva, en ese país hay un fuerte intervencionismo del Estado y recurrencia de prácticas desleales en el comercio internacional.
“El centro comercial facilitará el trabajo de fiscalización de las autoridades mexicanas, toda vez que todos los expositores y vendedores están localizados y permiten tener una cadena de importación segura”, consideró Juan Carlos López, director del Dragon Mart.
Pero el Presidente del CICEG replicó que ese confinamiento no garantiza nada y que combatir prácticas desleales es costoso y complicado para las empresas, mientras que las resoluciones tienden a ser tardadas y llegan a causar daños irreversibles.