Aún con la posibilidad de frenar el aumento anual de sus saldos, 7 de cada 10 deudores del Infonavit siguen con créditos en salarios mínimos. Pocos son los que hacen los trámites para convertir sus contratos a pesos.

El programa del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores  tiene identificado actualmente en Quintana Roo 68 mil 255 créditos que podrían tener el beneficio del programa denominado Responsabilidad Compartida.

El objetivo del programa es que los montos de los créditos hipotecarios no suban en cada aumento del salario mínimo, que en este año la variación fue del 20 por ciento.

Sin embargo, desde 2019 que inició el programa, en el estado sólo 27 mil trabajadores ya migraron a ese nuevo esquema para pagar menos. Del total que aprovecharon el programa se ha reportado un ahorro de más de mil 600 millones de pesos.

Víctor Ducoing Pedroza, gerente de créditos del Infonavit, mencionó que los trabajadores tuvieron, al cierre de 2022, la posibilidad de realizar el trámite, sin que incrementara el crédito junto con el aumento del salario mínimo.

Para aquellos que no aprovecharon todavía está disponible, aunque ya sería ajustado a este año, sin embargo, por lo que el beneficio de no incremento lo verán para los siguientes años.

Los interesados deben realizar el trámite a partir del 9 de cada mes para así estar en la posibilidad de reestructurar el crédito. El trámite se hace desde el portal Mis Cuentas.

El derechohabiente solo debe ingresar al portal y ahí marca si es candidato a este programa de Responsabilidad Compartida, con ello adquirir la protección de los incrementos que afectan el pago del crédito de vivienda que son inflación o aumento de salario.

El aumento de los créditos hipotecarios conforme el incremento del salario mínimo representa un duro golpe para la economía de los derechohabientes provocando incluso, en ocasiones, caer en cartera vencida por la imposibilidad de cubrir los pagos mensuales.

De acuerdo con los números del Infonavit, en Quintana Roo la cartera de créditos asciende a un monto de 66 mil 176 millones de pesos, de los cuales, solo 51 mil 139 millones están considerados como vigentes, es decir, que se encuentran al corriente con los pagos.

En tanto, 12 mil 586 millones de pesos son de cartera vencida (estos registran retrasos en los pagos por más de 90 días); y dos mil 451 millones corresponden a prórrogas, que refiere a créditos vigentes de trabajadores que perdieron su relación laboral y que les fue otorgada una prórroga en sus pagos.