Conforme las obras del Tren Maya finalizan, algunos trabajadores ya fueron despedidos y ahora regresan a  sus antiguas actividades.

La información sobre la Población Ocupada según Sector de Actividad Económica, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), detalla que en los últimos meses se han perdido 7 mil 350 fuentes de trabajo en Quintana Roo relacionadas con el ramo de la construcción.

En la actualidad, 85 mil 85 personas se encuentran ocupadas en este sector. Organismos como la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) delegación Quintana Roo, han advertido que la mayoría de estos trabajadores se encuentra al servicio del Tren Maya, y esta es la razón por la que se tiene un déficit de mano de obra para los contratos privados.

Las actividades económicas relacionadas con los transportes y comunicaciones, también vinculadas con el proyecto federal, experimentaron en los últimos meses una pérdida de 8 mil 86 empleados.

En contraste, la agricultura y ganadería registró un aumento de 6 mil 285 personas ocupadas, mientras que el sector comercial tuvo un impacto positivo de 12 mil 307, y los restaurantes y servicios de alojamiento, 5 mil 258.

Benjamín Gutiérrez Reyes, presidente de la Asociación de Productores Cañeros A.C., dijo que ya se esperaba que este año, el término de algunos tramos y secciones del Tren Maya, ocasionara una ola de despidos masivos, provocando que los trabajadores regresen a sus empleos habituales.

“Muchos jornaleros optaron por el Tren Maya en lugar de emplearse en el campo. Esto nos provocó un déficit durante un par de años. Ahora que vuelven, el reto es ofrecerles opciones competitivas alternas, pues para nosotros, los productores, es imposible darles los mismos salarios y prestaciones que el Gobierno Federal”,

sostuvo.

El sector hotelero también había experimentado un 30% de pérdida de trabajadores por el proyecto ferroviario, pero los datos del Inegi revelan que poco a poco están volviendo a emplearse en esta actividad económica.