Festeja Día de la Santa Cruz a sus ocho años de edad

El padre de familia dijo que el menor apenas sabe escribir y no quiere retomar los estudios.

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El menor ayuda a su papá en la albañilería. (Adrián Barreto/SIPSE)
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Adrián Barreto/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- Se llama Gabriel. Apenas si sabe leer y escribir, pues por necesidad dejó la escuela, y desde hace poco más de un año acompaña a su padre para batir cemento y arena en jornadas de más de 10 horas, excepto ayer, con la celebración del Día de la Santa Cruz sólo mediodía le tiró a la pala.

Con seguridad él no forma parte de las estadísticas de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) a la que su papá, don Abraham, está afiliado desde hace siete años.

Sin embargo, ayer festejó el Día de la Santa Cruz como el resto de los cerca de 2 mil croquistas de la industria de la construcción. Trabajó desde las siete de la mañana y “le paró” apenas pasado el mediodía, pues “la taquiza” del 3 de mayo lo esperó por la tarde.

A sus ocho años, no festeja en las aulas el Día del Niño. Su padre, Abraham, dice que fue a la escuela, pero sólo cursó el primer año y parte del segundo. La necesidad lo hizo entrarle al trabajo desde muy pequeño, así como su hermano, Alfredo, que ronda los 12 años de edad.

“Ahora ya no le gusta, yo he querido que regresen a la escuela, pero ya no quieren (…) lo único bueno es que van a ser gente de bien, gente trabajadora porque les gusta trabajar desde niños”, apunta el señor, maestro de obra.

Gabriel dejó los juegos por la mezcla, pero no perdió el sentido de las cuentas, porque aquí, en la albañileada, también se mide, se calcula con precisión de matemático, pero apenas le bastará eso para sacar el nivel de una barda, no para saber comprender un texto sobre la arquitectura moderna, o al menos eso es lo que dicta la historia reciente del rezago educativo.

Gabriel regresará este sábado a terminar la construcción casera que realizan en algún lugar de la ciudad, y así habrá sobrevivido al segundo 3 de mayo que en calidad de trabajador festeja.

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