José Barón/ SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Pasada las 8 de la noche, de este miércoles, dio inicio entre aplausos el concierto navideño “Un canto de gozo”, interpretado por el coro Lux Aeterna.

Su estrado, fue el altar de la Catedral de Cancún, ubicada en el Ombligo Verde entre las avenidas Puertos y La Costa. Donde alrededor de 14 artistas, entre ellos estudiantes y profesionistas, reunidos por la pasión en común que tienen por la música, afinaron sus voces y entonaron varias piezas musicales, las cuales hicieron recordar al público presente, que la navidad se encuentra ya a la vuelta de la esquina.

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Acompañados en el piano, por el profesor Omar Barrera; y bajo la batuta del maestro Rafael Sánchez, director del grupo musical.  El coro Lux Aeterna ofreció un recital navideño, que permitió a chicos y grandes rememorar la esperanza y calidez de las fiestas decembrinas.

El concierto coral con coro de cámara interpretó melodías alusivas al adviento, es decir, al tiempo que precede al nacimiento de Jesucristo. El repertorio estuvo dividido en tres actos.

En el primero, solistas representaron piezas clásicas, en diversos idiomas, como el Ave María, The secret of Christmas, ¡O holy night! y Jesu Bambino.

La segunda tanda de melodías, fue interpretada por un cuarteto de talentosos cantantes, quienes deleitaron al público con villancicos, entre ellos: Canto de las campanas (de origen ucraniano), Glory in the highness (cantico americano), y el infaltable villancico español “25 de Diciembre”, mejor conocido como ‘fum, fum, fum’, debido a su jocoso estribillo.

El último acto, contó con la participación de todo el coro, y se trató de un relato sobre la Natividad de Jesús. Los coristas permitieron a los presentes realizar un viaje por el tiempo, en donde la música fue el medio de transporte y las estaciones, los pasajes y frases bíblicas referentes al adviento. Entre ellos destacan: ¡Ven Mesías sálvanos!; Considera lo que ha hecho Dios; en la oscuridad había luz; preparen el camino al Señor. Acompañados de estribillos como: ¡Dulce madre acuesta al niño en el pesebre, que yo las estrellas miro pasar y una canción de cuna le cantaré!; ¡Como otros infantes, este bebé también lloró!; ¡Mañana danzaré la música de la gracia!

El repertorio de piezas musicales navideño fue del agrado de los oyentes, para quienes fue muy poco tiempo, la hora que duró el recital. El común de los comentarios fue que lo disfrutaron y que esperan que haya más espacios para este tipo de actividades culturales que permitan un espacio de entretenimiento para toda la familia.