“Los Tres Tristes Tigres” dan divertido sermón en Cancún
Así se vivió la velada con el trío de talentosos comediantes en el espectáculo “Risa de cuerpo presente”.
En tiempos post pandemia, donde la comedia se ha convertido en una vacuna para el estrés, el trío “Los Tres Tristes Tigres” llegaron al Teatro de Cancún para dar una importante dosis de buen humor con su espectáculo “Risa de cuerpo presente”.
Ante alrededor de 500 personas que se dieron cita en el recinto de la zona hotelera. Jesús Gallardo, Pedro Palacios y Érick Ibarra dieron rienda suelta a lo mejor que saben hacer: cantar y hacer parodias, provocando las carcajadas del público con su show.
Así que entre rutinas, monólogos y canciones un escenario que emulaba un atrio de iglesia, este trío inició su visión de cómo una institución religiosa podría aprovechar los tiempos modernos para “ganar más feligreses”.
Recordaron aquellas épocas en las que el nombre de las personas estaba asociado con el santoral del día de su nacimiento, pero como bien apuntaron no hay muchas personas que lo sepan o por lo menos eso quedó de manifiesto cuando preguntaron a algunos asistentes.
No podía faltar la relación entre un concierto y una misa, haciendo sátira de cómo el sacerdote se convierte en una especie de frontman frente a sus feligreses, provocando las carcajadas casi celestiales del público
Pero eso no es todo, entre canción y canción, como si fuera un sermón dominical había que dar algunas sugerencias. El público no dudó en lanzar los mejores tips para aumentar la audiencia en las misas, así que ni tardos ni perezosos aseguraron que una buena idea para reunir más adeptos, las Iglesias podría adoptar el ritmo de reguetón para que las nuevas generaciones se sientan identificadas y quieran asistir.
Vida cotidiana, terapia de pareja, las mentiras y hasta la adicción que las nuevas (y no tan nuevas) generaciones dan a las redes sociales, fueron algunos de los tópicos que desataron las risas, algunas nerviosas, del público.
Fue tal la catarsis y comparación eclesiástica, que hasta pasaron un pandero por la primera fila, tal como se hace en misa, explicando que lo recaudado iría a alguna acción benéfica, generando la risa nerviosa de los asistentes; de hecho uno de ellos hasta les puso una camisa de “Los Tigres de Quintana Roo” a fin de recaudar más fondos.
De lo que no hubo duda es qué “risa de cuerpo presente”, su quinto show en alrededor de 14 años de trayectoria se convirtió en un bálsamo de desestrés, risas y buena música para los asistentes, que aplaudieron y disfrutaron el talento de este trío de regiomontanos que ya cuenta con millones de seguidores en las redes sociales.