Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Una riña entre dos grupos al interior del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Chetumal, estuvo a punto de desencadenar en motín. Durante dos horas aproximadamente, cientos de reos con piedras y palos se replegaron hacia el portón principal de la cárcel, según relatos de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) que resguardaban las instalaciones. Las autoridades implementaron el protocolo de seguridad ante el suceso.

Los hechos se reportaron alrededor de las 9 horas y de inmediato decenas de patrullas de la Policía Municipal Preventiva, de la Policía Estatal, la Policía Ministerial se presentaron en la cárcel ante el temor de una fuga masiva.

En cuestión de minutos, la seguridad externa de la cárcel se reforzó con elementos de la Policía Federal y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), además de paramédicos de la Unidad de Respuesta a Emergencias Médicas (UREM) y el Cuerpo de Bomberos. En tanto, la circulación fue interrumpida en la Prolongación Álvaro Obregón desde la avenida Revolución hasta el puente de la avenida De los Insurgentes, tramo en el que también se colocaron moto-patrullas que desviaban a los automovilistas.

Saquearon camión de galletas

Aprovechando los disturbios al interior de la penitenciaría, algunos internos se abastecieron de galletas que saquearon de un camión tipo Nissan con número PHG-662, de la empresa Dondé, que en el momento de la trifulca se encontraba surtiendo pedido de las tienditas del Cereso.

El Secretario de Seguridad Pública, Juan Pedro Mercader Rodríguez, informó en el lugar que la riña fue entre un grupo de 40 reos del patio principal y 30 internos de la zona conocida como Almoloya. Ambos grupos peleaban el control de las actividades dentro del centro penitenciario.

Una vez controlada la situación en el Cereso, el Secretario sostuvo una reunión con los internos en la que les solicitaron que les permita pasar más cosas por la aduana del centro penitenciario, además de que no les restrinjan sus visitas, porque quisieran que todas las personas que las visiten puedan entrar. Aunque Mercader Rodríguez no precisó si se cumplirán dichas peticiones.