Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN,  Q. Roo.- Tres pescadores permanecieron a la deriva por más de 24 horas, al sufrir la embarcación una avería en una propela, cuando regresaban a Cancún. Los lancheros fueron rescatados la tarde de ayer por una lancha de búsqueda de la Armada de México, que los localizó anclados en un islote cerca de Isla Contoy.

Los trabajadores del mar narraron que alrededor de las 18 horas, en el trayecto a Puerto Juárez, a la embarcación se le rompió la propela y ya no pudieron avanzar.

La versión que dieron a las autoridades marítimas fue que con sus ropas hicieron una especie de vela para que el viento los empujara hacia la costa, pero debido al mal tiempo provocado por el frente frío 36, el oleaje los arrojó contra un islote, donde se resguardaron durante más de 24 horas.

Los pescadores identificados como Julián, Raymundo y Roberto, salieron de las instalaciones de la cooperativa “Horizontes Marinos”, entre las 5 y 8 horas, en una lancha de 27 pies de eslora, la cual no tiene matrícula, ni nombre, señaló Arturo Martínez Ortiz, capitán de Puerto.

Tenían que haber regresado a las 20 horas a Puerto Juárez, según señalaron los representantes de la cooperativa. A esa misma hora, autoridades marítimas cerraron el puerto para embarcaciones pequeñas por el mal tiempo. Ayer, a las 9 horas, se presentaron tres dirigentes de dicha cooperativa para reportar el extravío de sus tres compañeros.

Otros trabajadores del mar también reportaron los hechos y dieron parte a la Quinta Región Naval, con sede en Isla Mujeres, y hablaron con el personal de rescate de la Secretaría de Marina. Sin embargo, ellos no sabían dónde fueron a pescar sus colegas, es decir, no tenían un marco de referencia para iniciar la búsqueda.

Uno de los principales problemas que enfrentarían las autoridades navales, era el mal clima, pues había rachas de hasta 50 kilómetros por hora y un oleaje de casi dos metros de altura.

Los dirigentes de la cooperativa mandaron embarcaciones a buscarlos al norte de Isla Contoy e Isla Pérez. Consideraron que era riesgoso para los pescadores porque iban a mar abierto y la embarcación era pequeña.

Un lanchero vio el barco, fue lo que comentó la hija de uno de los pescadores a la Capitanía de Puerto que inició la búsqueda de esta persona para que les indicara el área. Horas después lograron dar con el paradero de los náufragos.

En el momento de que se reporta el extravío de una lancha, se da aviso a las autoridades marítimas de toda la Península y embarcaciones mayores, para que reporten en caso de avistar la embarcación, mencionó Martínez Ortiz.