Las condiciones de vida de los quintanarroenses mejoraron en el último año, al tener mayor acceso a la educación, salud, seguridad social, vivienda, servicios básicos y alimentación; ahora hay menos pobres en Quintana Roo, reveló la Secretaría del Bienestar.

El año pasado, 80 mil 775 personas dejaron de ser pobres, toda vez que se contabilizaron 812 mil 100 quintanarroenses en condición de pobreza, cuando en 2021 se registraron  892 mil 875, de acuerdo con el Informe Anual sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social de las Entidades, Municipios y Demarcaciones Territoriales que se publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación (DOF).

Aún así, hay el registro de 639 mil 700 personas catalogadas con pobreza moderada y 172 mil 500 en pobreza extrema.

El informe resalta que bajaron los números de los seis indicadores de carencia social en la entidad. El primer rubro, que es de rezago educativo, se contabilizó a 268 mil 600 personas; todavía hubo carencia en el acceso a los servicios de salud en 449 mil 600 personas y aproximadamente 954 mil 700 carecieron del acceso a la seguridad social.

Además, 257 mil 100 personas sufren de rezago en cuanto a calidad y espacios en la vivienda; más de 387 mil en lo que respecta a servicios básicos en la vivienda; y por último, el acceso a la alimentación de calidad y nutritiva, difícilmente la tenían 493 mil 600 personas.

El estudio también destaca que Quintana Roo tiene un grado de marginación medio y un grado de rezago social bajo, a pesar de las estadísticas que resultaron.

Para seguir avanzando en el combate a la pobreza, el Gobierno Federal destina el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) que en el presente año va a dar prioridad a la infraestructura de salud, agua potable, mejoramiento de vivienda, drenaje, urbanización e infraestructura educativa.

Mara Lezama Espinosa, gobernadora de Quintana Roo, aseguró que se seguirá con la implementación de mayores programas que permitan seguir mejorando la calidad de vida de la población y con ello seguir acortando las brechas de la desigualdad, sobre todo para que la zona rural pueda tener más acceso a los servicios que requiere.