Gustavo Villegas/SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- Ambientalistas de la isla Cozumel celebraron que la Semarnat rechazó el proyecto de ampliación del muelle SSA México, terminal de cruceros ubicada en la zona sur de Cozumel.

La noticia fue confirmada por Brenda Hernández Hernández, representantes de la Conanp de la isla, la tarde del viernes, mediante mensaje de texto y reveló que esto fue publicado en la Gaceta Ecología del organismo ambiental federal.

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De acuerdo con el Oficio No. SGPA/DGIRA/DG/07061, donde se notifica la negativa, el promovente de la obra "Modernización del Muelle de la Terminal Internacional de Cruceros de Cozumel", es la empresa SSA México, S.A. de C.V.

La Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), no fue aprobada, manifestaron ambientalistas como Selene Mariel Tejeda Bravo, Guadalupe Álvarez Chulin de Azueta y Noemi Guadalupe Martin Cab, quienes celebraron la negativa para la construcción de un duque de alba y la ampliación de la pasarela.

La obra buscaba ampliar de dos a tres las posiciones de atraque de este muelle. Las conservacionistas iniciaron cada una por su cuenta una campaña en sus perfiles de redes sociales para incentivar a la población a participar en la consulta pública y tener la obra.

Por su parte, Brenda Hernández, subdirectora del Parque Marino Arrecifes de Cozumel y representante de la Comisión Nacional de Aéreas Naturales Protegidas (Conanp), no dio detalles sobre la negativa de la Semarnat y únicamente contestó de manera afirmativa a la pregunta que buscaba confirmar la información.

"Un día para celebrar muy bien por la comunidad en Cozumel que ayudamos a que se rechazara por Semarnat un proyecto de ampliación de muelle SSA, donde estarían en total riesgo los arrecifes y la isla de Cozumel", manifestó Selene Tejeda.

El presupuesto era de 56 millones de pesos para la construcción de una plataforma apoyada en nueve columnas, lo que significaría una ampliación de su capacidad en un 50 por ciento y por lo tanto el incremento de la actividad humana en la zona.

Guadalupe Álvarez opinó que la construcción hubiera dañado más los arrecifes en el área y la actividad humana se incrementaría de manera considerable, por lo que consideró un triunfo el que las autoridades ambientales federales rechacen, por el momento, el proyecto.

Noemi Martin coincidió con Álvarez Chulim y añadió que es hora de que se piense en Cozumel y establecer mediante un estudio ya de manera definitiva, cuál es la carga de la actividad humana que puede soportar el destino número uno de cruceros en el continente americano. Cozumel vive de sus bellezas naturales y es lo que atrae al turismo, sino lo cuidamos, perderemos esas bellezas y el turismo, concluyó.