SESA: Pandemia aumentó los casos de obesidad en Q. Roo

Los más afectados son los infantes y los adultos que modificaron sus hábitos alimenticios.

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SESA: Pandemia aumentó los casos de obesidad en Q. Roo. (Daniel Tejada/SIPSE)
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La pandemia disparó la cantidad de quintanarroenses con problemas de obesidad. Los más afectados son los infantes y adultos, quienes modificaron sus hábitos, incluidos los alimenticios durante la contingencia sanitaria.

Los diagnósticos de la Secretaría de Salud reportaron que en el 2019 el 24% de la población quintanarroense tenía algún grado de obesidad y se registraban 200 nuevos casos por semana.

A partir de la pandemia del Covid-19, el porcentaje rebasó el 35%, con 700 nuevos pacientes semanales

Para el 2022, los datos de la Secretaría de Salud reportaban un 38% de población quintanarroense en esta condición, y cerca de 600 casos nuevos.

De este grupo, el mayor porcentaje de pacientes lo tiene los niños de seis a 11 años, con un incremento de 64% en la cantidad de nuevos casos. Le siguen los adolescentes, con un 48% de aumento.

“Esto es consecuencia de los malos hábitos alimenticios que se adquirieron durante la pandemia y que continúan arraigados entre la población”, declaró la nutrióloga Viridiana Fernández Montalvo, destacando que por el encierro las personas hacen menos ejercicio y comen comida chatarra con mayor regularidad.

“Siempre hemos tenido problemas alimenticios entre los niños y adolescentes, pero antes de la pandemia eran un poco más activos en la escuela, el parque o haciendo deporte. Con la contingencia sanitaria y el boom de las redes sociales dejaron de hacerlo para quedarse en sus casas en el celular”.

Resaltó que también consumieron con mucha mayor regularidad comida grasosa o alta en azúcares, a fin de satisfacer la ansiedad que les producía el encierro.

Citó que ante esta situación es notorio que no están funcionando las campañas de concientización para combatir este flagelo que puede derivar en peores problemas como enfermedades crónicas o degenerativas.

“Para tratar de prevenir enfermedades crónicas y degenerativas, debemos mejorar nuestra calidad de vida, para esto hay que empezar con lo básico: consumir frutas y verduras harán un cambio significativo en nuestro cuerpo, hacer ejercicio nos dará una motivación más para disfrutar la vida de forma saludable”, puntualizó.

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