Edgardo Rodríguez/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El estado de Quintana Roo se encuentra en alerta debido a la confirmación de 31 casos de rabia paralitica bovina, de los cuales 21 se presentaron durante el año pasado y este año se han registrado 10 casos más, por lo que las autoridades sanitarias estarán solicitando apoyo del gobierno estatal y federal para campañas epidemiológicas.

Alvino Henríquez, presidente del Comité Estatal de Fomento y Protección Pecuaria, informó que la rabia paralitica o también conocida como derriengue, es una enfermedad infectocontagiosa, aguda y mortal que ataca al sistema nervioso central de los animales , es causada por un virus de la familia Rhabdoviridae y es transmitida por la saliva de animales enfermos a los bovinos y especies ganaderas como equinos, ovinos, caprinos y porcinos. En este caso, dijo que el principal transmisor ha sido el murciélago hematófago o vampiro, el cual ha sido detectado en la zona poniente de Othón P. Blanco y Bacalar.

Señaló que el año pasado se iniciaron con las tareas de monitoreo en la zona de Bacalar ya que existe una campaña permanente para la detección y análisis de este virus, pues en años anteriores ya se habían registrado varios casos acerca de este padecimiento mortal, por lo que periódicamente se hacen muestreos en esta zona.

En dichos recorridos, dijo que se levantaron 29 encéfalos que fueron enviados al laboratorio para su inspección y de los cuales se confirmó que 21 habían dado positivo en la rabia, por lo que a raíz de ello se dispersaron alrededor de 20 mil vacunas en diferentes ranchos de la zona; este año se volvió a realizar un sondeo por la misma región y se pudo constatar 10 casos más de dicho virus.

Ante esta situación, pidió a los dueños de los animales que acudan a las oficinas del Comité de Protección para solicitar las vacunas en contra de esta enfermedad ya que existen medicinas que pueden prevenir la infección en los animales. De igual manera, dijo que en los próximos días se estarán realizando una especie de trampeos y capturas del murciélago hematófago a fin de reducir la población potencialmente transmisora de la enfermedad.

Para estas tareas, detalló que estarán solicitando el apoyo de las autoridades Sanitarias a nivel federal y recursos por parte del gobierno del estado ya que es un padecimiento que pone en riesgo el estatus sanitario del hato local.