Alejajdro Castro/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- En Quintana Roo, 55 siniestros -provocados o fortuitos- devastaron 12 mil 901 hectáreas de vegetación durante la temporada de incendios 2019, la afectación más alta en los últimos cinco años.

De acuerdo con cifras oficiales, la superficie en hectáreas impactadas por el fuego casi duplicó la que se registró en 2018, cuando fue de seis mil 855 hectáreas.

El territorio quemado este año equivale a 54 veces el tamaño de Isla Contoy y 29 veces el de Isla Mujeres, con una afectación principalmente en el centro y sur del estado.

También te puede interesar: Detectan otro incendio forestal en la zona sur

La vegetación más afectada fue la arbustiva y herbácea, como sabana de matorrales y pastizales, que comúnmente se regeneran con rapidez, aunque también hubo quemas que afectaron más de mil 300 hectáreas de selva.

Entre las áreas naturales protegidas que resultaron con mayor grado de afectación se encuentran la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an, donde ocurrieron los incendios más grandes que, en conjunto, sumaron más de cinco mil hectáreas devastadas, así como la reserva natural protegida “Balaan Kaax”, con múltiples quemazones.

Asimismo, en esta temporada la Comisión Nacional Forestal (Conafor) reportó que el tiempo promedio de detección de los siniestros fue de 29.1 horas, casi tres veces mayor que en 2018 cuando el promedio de horas que tardaron las autoridades en percatarse fue de 11 horas con 42 minutos.

En ambos casos, es el promedio más alto a nivel nacional, pues la media de detección en otros estados de la República Mexicana se calcula que es de una hora con siete minutos.

La demora en la localización de un incendio también se vio reflejada en el tiempo de llegada de las autoridades para su combate, pues tardaron en promedio 17 horas y el fuego estuvo activo 244 horas en promedio, según datos aportados por la autoridad federal.

Desde que se tiene registro, 2013 ha sido el peor año para Quintana Roo en cuestión de incendios, con una superficie quemada de 79 mil 22 hectáreas; desde entonces, la cifra más alta ha sido la de este 2019.