Stephani Blanco/SIPSE
CANCÚN. Q. Roo.- Para suplir la baja de turistas de Estados Unidos y Canadá que han dejado de viajar en las mismas cantidades a Cancún, los hoteles bajaron sus tarifas hasta 10% para atraer turismo latinoamericano, que si bien reporta buenas ocupaciones las ganancias no son las mismas.

Aunque sigue llegando el visitante al Caribe mexicano, está siendo más barato y algunos mercados como el brasileño deciden llegar al destino ya que incluso le sale más económico que hacerlo dentro de su país, mencionó Roberto Cintrón Gómez, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos.

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“El destino está bien posicionado alrededor del mundo y los mercados alternos, como Colombia, Argentina y Brasil son con los que han estado sustituyendo parte de la falta del mercado proveniente de Estados Unidos y Canadá, pero con tarifas más reducidas”, mencionó.

El gremio comenzó a comercializar con precios de hasta 15% más bajos ya que están estancias más largas y había que tomar en cuenta que son economías diferentes y el tipo de cambio es diferente contra un dólar y por ello tomaron esas decisiones.

“Estamos mal competitivamente en precios comparado con el resto del Caribe ya que somos más baratos”, agregó Cintrón Gómez.

El Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo reporta que el turismo de lujo representa solo 10% del total de los visitantes que llegan al destino.

De entre los 15 principales mercados que más pasajeros reportan al Aeropuerto Internacional de Cancún, siete son provenientes de Estados Unidos, aunque ya está Panamá y Bogotá, Colombia, que en conjunto representan 522 mil 623 pasajeros de los 7.2 millones que tiene registrados la Secretaría de Turismo del Estado (Sedetur), según su reporte del año pasado.

La derrama económica fue el año pasado de 8 mil 810.38 millones de dólares, solo 2.4% comparado con un año anterior.

Cintrón Gómez mencionó que el sargazo está afectando a las reservaciones para la temporada media que es de septiembre a noviembre, ya que van lentas y espera que no se tenga un impacto negativo que llevaría a que Cancún tuviera de vuelta una temporada baja.