A pesar de que Quintana Roo registra una inflación general de 7.55% este año, los turistas, principalmente extranjeros, gastan casi 150% más en adquirir servicios de alimentación, hospedaje y entretenimiento durante su visita al Caribe mexicano.

Según los datos levantados recientemente como parte de los estudios que hace el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) así como de la Secretaría de Turismo (Sectur), de enero a mayo de este año el gasto promedio de los turistas internacionales fue de 759.12 dólares, una cantidad muy superior a los 304.12 dólares que gastaban el año pasado en restaurantes, discotecas, actividades náuticas y hoteles.

Por su parte, el gasto promedio de cada visitante nacional fue de 3 mil 801 pesos este año, contra 3 mil 102 pesos del año pasado.

“Esto nos demuestra que Quintana Roo vuelve a ser altamente competitivo en materia turística”,

declaró José Silva Bastos, profesor investigador de la carrera de Dirección Internacional de Hoteles de la Universidad Anáhuac.

Cita que desde 2017 están realizando sondeos sobre el comportamiento de los visitantes en Quintana Roo, datos que son entregados tanto al Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) como al Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC).

Lo que descubrieron es que los turistas estuvieron de acuerdo en gastar más en su visita al Caribe mexicano, siempre y cuando se les ofrezca una mejor calidad de servicio y productos.

“Ellos pagan por una experiencia. Incluso el 42% de los encuestados de este año respondieron haber gastado mucho más de lo que tenían planeado y aún así sienten que valió la pena”.

Sin embargo, el aumento en los gastos de los turistas no está impactando como debería en las utilidades, debido a la alta inflación.

Destaca que de acuerdo con los datos históricos de sus investigaciones, aún con la pandemia, en Quintana Roo han aumentado los costos promedio en alimentación turística en 81%, transporte en 63%, hospedaje en 32% y servicios de entretenimiento, como antros y actividades acuáticas, 27%.

“Con el aumento del precio de los insumos e impuestos, el costo de producción, si es que así le podemos llamar a lo que le cuesta a un restaurantero, dueño de hotel o un taxista brindar su servicio, ha provocado que el margen de ganancias se reduzca en 24%. Es decir, que se necesita aumentar en casi la misma proporción el precio de los servicios turísticos en el estado para lograr tener un margen de ganancia similar al de hace cinco años”.

De haber incrementos de precios, está seguro que los visitantes pagarán este incremento, siempre y cuando se siga garantizando la calidad en su viaje a las playas quintanarroenses.