Turistas no quieren visitar otra zona arqueológica que no sea Chichén Itzá
Algunos vendedores que mantienen el bloqueo revelaron que esperan haya una resolución este jueves.
La alternativa de visita a otros sitios arqueológicos diferentes a Chichén Itzá luego de tres días de bloqueo al acceso del sitio, no ha sido recibida de buena gana por los turistas, informaron vendedores de tours de Playa del Carmen.
De acuerdo con un sondeo realizado, las salidas no se han cancelado, pues ofrecen alternativa a los visitantes en los puntos de encuentro, como Ek Balam o Cobá. Aunque éstos han mencionado que el motivo de su llegada a la Riviera Maya, muchas veces, es conocer el sitio arqueológico de Chichén Itzá.
Isabel Aragón, vendedora de tours, dijo que también muchos turistas se encuentran a la espera para que se reactive plenamente el acceso al famoso sitio arqueológico ubicado en el vecino estado de Yucatán.
“Aunque hay zonas arqueológicas como alternativa, la verdad es que mucha gente viene sólo para conocer Chichén Itzá que es una de las Maravillas del Mundo. Llegan y se decepcionan porque sólo quieren ir allá y muchos están cancelando y a la espera de que en estos días se reactive, por ejemplo, en mi caso tengo cuatro clientes que están a la espera de que se reactive” , mencionó Isabel Aragón.
Y así ocurre en varios puntos de ventas de tours que se encuentran en el centro de Playa del Carmen. En la localidad a diario salen viajes al destino arqueológico, que incluyen además de la entrada, alimentos y bebidas.
Manifestantes esperan resolución este jueves
Fuentes consultadas que mantienen el bloqueo a los pueblos de Pisté y Xcalacoop, dijeron que esperan que este jueves haya una solución a la problemática que mantienen, pues buscan que el director del recinto arqueológico y representante del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) sea destituido por querer desalojarlos.
En entrevista telefónica con Silvia Cimé Mex, una de las representantes de la cooperativa de artesanos Herederos Mayas, dijo que existe la intención de desalojar del sitio arqueológico a alrededor de 600 personas dedicadas a diversas actividades de venta y prestación de servicios.