Claudia Olavarría/SIPSE
CANCÚN, Q.Roo.- De las tres mil 850 playas del mundo con certificación Blue Flag (bandera azul), México tiene cinco, de las que destaca playa Delfines que actualmente está en proceso de evaluación para obtener nuevamente dicho reconocimiento. La bandera azul es una ecoetiqueta ampliamente reconocida en el mundo, que posiciona el país y destino donde se encuentra.

José Eduardo Mariscal de la Selva, director municipal de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat), comentó que playa Las Perlas es candidata a obtener dicha certificación en breve, por lo que trabajan con Pronatura México A.C., autorizada para operar dicha certificación.

Una de las principales industrias del mundo que generan cerca de 200 millones de empleos y superan el Producto Interno Bruto (PIB) es el sector de viajes y turismo, sobrepasando los tres mil 500 mil millones de dólares.

Prevén que para el 2020, 1.5 millones de turistas gastarán en promedio dos billones de dólares al año o más de cinco mil millones de dólares al día, aunado al turista local difícil de cuantificar pero que igual utilizan las playas.

Cancún fue el destino elegido de México para celebrar el 'Encuentro Internacional de Operadores de la Certificación Blue Flag 2013', en donde intercambian experiencias y se asesora a los miembros de los 38 comités de playas limpias del país buscando impulsar los destinos de playa.

Organización conformada por 48 países dedicada a la certificación de playas en el mundo a través de rigurosos criterios sobre la calidad del agua, información y educación ambiental, gestión ambiental, seguridad y otros servicios que atraen a turismo de alto poder adquisitivo y preocupado por el medio ambiente.   

Las zonas costeras están expuestas a: fuentes terrestres de contaminación (descargas de aguas negras y residuos industriales sin tratar), contaminación marina (entre ellos vertidos de petróleo), sedimentación por erosión, actividades acuáticas, destrucción del hábitat, proyectos de infraestructura mal o no planificados, actividades no reguladas y explotación petrolera y de gas; todo esto repercute en el entorno marino y calidad del agua, por ello la importancia de la certificación para cumplir con 29 criterios.