Vencidas en Bacalar

Enfrascado en una lucha de poder con un grupo de regidores, el alcalde de Bacalar, Alexander Zetina...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Enfrascado en una lucha de poder con un grupo de regidores, el alcalde de Bacalar, Alexander Zetina Aguiluz, ha realizado movimientos desesperados para mantener el control de la mayoría del Cabildo y proteger a su tesorero Juan Borges Chim, quien estaba en la mira de los concejales rebeldes que amenazaron con destituirlo.

Y es que desde hace un par de meses seis de los nueve regidores del décimo municipio unieron fuerzas para someter al alcalde turquesa y fraguaron la exigencia de la destitución de su hombre de confianza en la tesorería para doblegarlo.

El grupo rebelde conformado en un inicio por los regidores Oneyda Cuxim (PRI), Justina Cen Padilla (PRI), José Melchor Ávila (PRI), Candita del Rocío Ku (PRD), Miguel Ángel Ferral (Morena) y Antonio Viveros (PVEM) no logró concretar el golpe de autoridad a pesar de que contaban con la mayoría, ya que Alexander con marrullerías evitó las sesiones del Cabildo y de inmediato empezó a operar para retomar el control.

Para desactivar la alianza, el alcalde formado en la política del SNTE atacó a los regidores más endebles. Primero, aprovechando el pacto de Nueva Alianza con el gobierno de Carlos Joaquín para que mantenga la mayoría en el Congreso, a través del diputado Javier Padilla –uno de sus incondicionales– solicitó al gobernador su intervención para calmar a la perredista Candita del Rocío, quien se cuadró de inmediato.

Después, en un movimiento realizado con total sigilo en días recientes, convenció a la regidora priista Justina Cen Padilla de abandonar a los rebeldes garantizando a cambio su permanencia en la regiduría por lo que resta del actual periodo.

Y es que Justina había firmado un pacto político con su suplente, Belén Pantoja, para repartirse la regiduría un año para cada una, por lo que le restaban unos cuantos meses en el Cabildo; usando esto a su favor, Zetina Aguiluz ofreció contratar de inmediato a la suplente Belén Pantoja como directora del Registro Civil, con el mismo sueldo y prestaciones que recibiría en la regiduría para que Justina se quedara con la regiduría, a cambio de su “apoyo y lealtad”.

Así mató dos pájaros de un tiro, pues echó del municipio a la ex directora del Registro Civil, Ofelia Montejo Martínez, identificada con el ex priista Juan Manuel Herrera, con quien Alexander tiene algunas rencillas.

Con artimañas a la vieja usanza y usando el látigo del presupuesto y las canonjías, Alexander retomó el control de su Cabildo al menos por el momento, ya que dejó expuestas sus debilidades y el bloque rebelde acecha.

Lo más leído

skeleton





skeleton