Vicente Fernández
El pasado 12 de diciembre falleció Vicente Fernández, sin duda con él podría morir un género de música...
El pasado 12 de diciembre falleció Vicente Fernández, sin duda con él podría morir un género de música ya que no se ve a ningún otro sucesor en puerta.
La música vernácula que nació como tal en los años 30 tuvo el apoyo del cine nacional, que sin duda fue un hacedor de figuras, empezando con la película “Allá en el rancho grande”, de 1936 y del director Fernando de Fuentes.
Entre ellas podemos nombrar a Luis Aguilar, Miguel Aceves Mejía, Jorge Negrete y Pedro Infante, entre los más sobresalientes.
Y ya en los años 50 con la llegada de la televisión el cine ya no estaba en su mejor momento y la industria entró en crisis. Y en los 60 empiezan a surgir personajes como Lola Beltrán, Javier Solís, Lucha Villa y Vicente Fernández.
La temprana muerte de Javier Solís dejó la carrera libre a Vicente Fernández, que sin duda tenía lo necesario para llegar muy alto.
Al igual que todos los personajes anteriormente mencionados, incursionó en el cine y se volvió productor de sus propias películas con mucho éxito.
Obvio, Vicente no contaba con un Ismael Rodríguez como Pedro Infante, ni con las historias que llevaron a la pantalla grande y el cine ya no estaba en su época de oro.
Pero Vicente se atrevió a hacer cosas como aquel disco titulado “15 Grandes con el No. 1”. En este disco se arriesgó a grabar los éxitos de Emmanuel, José José, José Luis Perales, Juan Gabriel, Rocío Dúrcal, Raphael, Camilo Sesto, y hasta de Frank Sinatra interpretando “A mi manera”.
Todas estas grabaciones con arreglos de mariachi muy bien hechos y espléndidamente interpretados. Debo confesar que el mariachi no es lo mío, pero debo reconocer cuando suena bien.
A lo largo del tiempo cantantes van y cantantes vienen, pero sucede algo raro que me preocupa. Después de Lola Beltrán y Lucha Villa no ha habido quien ocupe su lugar.
Por ahí anda Aída Cuevas, pero no llena el lugar de estas divas. Vicente estuvo solo y no hubo nadie con los tamaños de una celebridad de esa envergadura, que siquiera se pareciera a él.
Ahora que él no está, no veo quien ocupe su lugar. Alejandro Fernández canta mejor que todos, pero no se dedica al 100% al género ranchero y viviría con la sombra de su padre por siempre.
Deseo en verdad que de estas nuevas generaciones surja alguien y que no se pierda este importante género musical por la ausencia de personajes. Hasta la próxima semana.