De 365 días del año, los últimos, ese famoso  lapso de convivencia desde el 12 de diciembre y hasta el 6 de enero, los temas en casa, en la cena de Nochebuena, o en la reunión de amigos el 31 de diciembre son invariablemente los de índole económica.

Durante casi un mes entre las carreras del consumismo por hacer las compras de comida, regalos, juguetes, ropa y tanta cosa que en muchas ocasiones no necesitamos viene a la mente una pregunta ya programada.

¿Cuánto subirán las cosas este año?, cada año es lo mismo, siempre los aumentos en los precios de varios servicios se realizan en los primeros días de enero.

Pero esto no detiene la marcha o la ola de compradores, que no pueden dejar pasar la Nochebuena sin estrenar algo, o sin regalar algo. 

Hace falta pararse un momento. Hacer a un lado ese consumismo y pasar un buen fin de año con agradables convivencias, cultivando amistades e incluso aprendiendo a usar el dinero.

Al dinero Giovanni Papini lo llamó “el excremento del Diablo”, ese pedazo de papel o moneda que no tiene valor alguno, pero que sin él no se puede comprar nada. Lo usamos aún sin tenerlo. 

En fin, en este inicio de año, que no sea el dinero el que nos mueva a hacer las cosas y, si lo hacemos, al menos aprendamos a usarlo.