Uno de los cambios más relevantes de la reciente Reforma Electoral federal es la conformación del Instituto Nacional Electoral (INE), el cual viene a sustituir al Instituto Federal Electoral (IFE), instaurándose como la única autoridad tanto en los procesos federales como en los locales. Mediante estas reformas constitucionales, se puntualizó cuáles serán las atribuciones de los organismos públicos locales para organizar los procesos electorales, la conformación de dichos organismos y el procedimiento para la designación de los funcionarios que los integrarán.

La creación del INE obedece al objetivo de fortalecer el sistema electoral mexicano a través del replanteamiento del diseño institucional del máximo órgano electoral en el país, para garantizar el pleno cumplimiento de los principios rectores de certeza, imparcialidad, independencia, legalidad, máxima publicidad, objetividad y profesionalización; no sólo a nivel federal, sino también y principalmente de los organismos electorales locales, muchos de los cuales se encontraban controlados por los gobiernos estatales. Con esta reforma se limitará la injerencia que los gobernadores ejercen sobre estos organismos.

A nivel estatal, el pasado 12 de junio se aprobaron las reformas a la Constitución local para armonizarla a la federal, incluyendo lo relativo al organismo público local. Las atribuciones que la ley otorga al INE respecto a los procesos locales requirieron modificaciones a nuestra norma suprema local a efecto de adaptar las nuevas redistribuciones de facultades que antes correspondían al Ipepac. Con estos cambios, nace el nuevo organismo electoral denominado Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Yucatán.

El Instituto será el encargado de organizar las elecciones en la entidad, y sus consejeros serán designados por el INE mediante el nuevo procedimiento de convocatoria establecido en la ley. Este nuevo método fortalecerá la independencia e imparcialidad del naciente organismo electoral local.