Administran en silencio su calvario
Eso sin contar las nuevas narcolistas de la Secretaría de Hacienda, donde habrá más tiendas de conveniencia que narcotienditas.
En Michoacán, como en el resto de la patria, hay tanto personal involucrado con el crimen organizado entre políticos, cantantes y chundos, funcionarios y malafachas que, en un futuro cercano, será más costeable meter al tambo a quienes no lo están. E igual y se desahoga la sobrepoblación en las cárceles.
Digo, así nos evitamos las broncas, los abogados, el debido proceso y las persecuciones insidiosas, la construcción de un gobierno alterno con forma de comisionado, y mantener a los góbers vigentes en calidad de objetos ornamentales. Eso sin contar las nuevas narcolistas de la Secretaría de Hacienda, donde habrá más tiendas de conveniencia que narcotienditas (apuesto doble contra sencillo a que ahí no aparecerá ningún papalord alfa de cuello blanco), los líos con las autodefensas, mejor que investigar a quienes no están metidos en el ajo y por qué.
Sí, gente muy extraña e inconsciente que en vez de jugar los juegos que la gente juega decidió mantenerse al margen de las tentaciones y el dinero fácil que luego es el más difícil. Quién sabe por qué no les animará aparecer en los narcocorridos, en boca del Kommander; tampoco aspiran a tener unas casitas art narcó al estilo templario ni les anima andar huyendo por túneles más laberínticos que los de la Línea 12; y mucho menos parece encantarles la idea de trabajar de nuevo rico y actuar cual retoño de líder sindical; y le hacen ascos trabajar 24x24 de mal hombre que hace canalladas que no tienen nombre.
Y luego, la flojera infinita de tener que corromper a las autoridades que, aunque no debe ser nada complicado, debe de ser más vomitivo que un casting con Catémoc Gutiérrez en su leonera del PRI-DF (todo indica que sus “hermanitos” del PRIcámbrico temprano lo van a echar a los perros), y más morboso que el seguimiento dudosamente periodístico a la enfermedad de García Márquez como si el maestro tuviera la cola de cerdo como uno de los 17 aurelianos.
Díganle no al estoicismo, más en temas bancarios, sobre todo ahora que sabemos que a Banamex lo desfalcan cada ocho días, incluso más que a Pemex. Ya se sabe, todos tienen una Oceanografía, aunque sea en la cabeza. Claro, a los clientes que se atrasan un poco en el financiamiento los persiguen peor que a La Tuta, y cuando se trata de grandes atracos de mil 469 mdp, administran en silencio su calvario.
PD: Tomo unos pocos días para ir a mi crucifixión, si Godot pregunta, díganle que voy vengo.
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