Que las gestiones del Ayuntamiento para solucionar el problema de un matrimonio de la tercera edad de la comisaría Tixcuytún rindió sus primeros frutos: los dueños del predio cuya cerca impedía el acceso al domicilio de esas personas acordaron retirarla ayer. Alejandro Ruz Castro, secretario de la Comuna, se reunió con Raúl Ferreiro, su esposa Anel Ramírez, y con Jorge Góngora, hijo del matrimonio integrado por Jorge Antonio Góngora Hoil, de 70 años de edad, y María del Carmen Sosa Brito, de 71, para informarles que, según los antecedentes catastrales, lo que los vecinos consideran una calle en realidad es propiedad privada. Sin embargo, para apoyarlos,  los propietarios del predio acordaron retirar el alambre de púas que impedía el acceso a la vivienda de los septuagenarios. El tema se hizo público porque los vecinos, molestos, se manifestaron en defensa de los ancianos y por la presencia de regidores del PRI y visitadores de la Codhey.

Que los regidores del PRI respondieron ayer mismo que, al menos, cuatro empresas desarrolladoras serían beneficiadas directamente con recursos federales del Ramo 33, destinados a combatir la pobreza, ya que se repavimentan calles y se construyen nuevas y amplias avenidas en la subcomisaría de Tixcuytún para beneficio de unos cuantos. El PRI sostiene que la repavimentación de una calle, la 17 entre 20 y 22,  no beneficia directamente a las familias en pobreza extrema de esa comunidad “sino a un nuevo proyecto residencial que incluye varios fraccionamientos y hasta un complejo médico de atención a la población de poder adquisitivo”.