Alcoholismo, acérrimo enemigo del deportista
En el país, muchas figuras del pugilismo al tener mucho dinero en sus bolsillos comienzan a ser rodeados por los 'amigos' ocasionales...
Aquí hemos comentado que el acérrimo enemigo del deportista es el alcoholismo o la drogadicción y, por eso no se debe satanizar a quienes tienen ese problema y en cambio sí inculcarles que enderecen el rumbo y rompan con las adicciones.
En el país, muchas figuras del pugilismo al tener mucho dinero en sus bolsillos comienzan a ser rodeados por los “amigos” ocasionales que los van involucrando en el camino del alcohol y al final terminan rendidos ante esa fatídica enfermedad.
Muchos han logrado rehabilitarse a través de programas de superación personal poniendo a la práctica un plan sencillo de 24 horas.
Yucatán no es la excepción, pues ex campeones nacionales o estatales pasaron por ese problema, pero ahora viven una vida diferente al lado de sus seres queridos.
Con la autorización de la joven pugilista, nos sentimos felices de mencionar a Itzel Domínguez Olán, quien luchó con sus problemas de adicción y ahora es campeona regional en la categoría de 51 kilogramos y será representante de Yucatán en la Olimpiada Nacional (ON) que se celebrará en Baja California.
Los líderes del Centro de Rehabilitación para Adictos “Vida Yucatán” y los más de 30 jóvenes (hombres y mujeres) que ahí viven deben estar orgullosos de que una joven como Itzel, quien practicando el maravilloso programa de recuperación se reincorporó a la sociedad y ahora está a un paso de ir por el metal dorado a la ON.
Todo eso ha sido por su enorme deseo de hacer a un lado por 24 horas la enfermedad llamada alcoholismo, siendo obediente con sus padrinos en el grupo y disciplinada en el gimnasio.
Las otras jóvenes que ganaron medallas fueron Valeria Ciau, en 54 kilos, y Jéssica Basulto, en 48.
Nos enteramos que en la fase regional de la ON celebrada en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, calificaron 12 yucatecos para la etapa nacional, 9 hombres y 3 mujeres.
También nos enteramos que esta vez hubo una mejor coordinación entre los mánagers y enlaces del Instituto del Deporte (DEY) y ojalá que todo continúe en buenos términos hasta la ON para evitar más fracasos y regresen a Yucatán con más preseas y olviden el fracaso del año pasado cuando trajeron sólo una presea de bronce.