Año nuevo, problemas añejos
Inicia el año 2014 con muchos pendientes para los gobiernos municipales, sobre todo el de Othón P. Blanco...
Inicia el año 2014 con muchos pendientes para los gobiernos municipales, sobre todo el de Othón P. Blanco, donde los problemas son los mismos que el año pasado.
Por ejemplo sigue sin resolverse el tema del transporte urbano y en la capital solo se cubren cinco rutas de quince que están proyectadas. Esto afecta la economía de los chetumaleños si tomamos en cuenta que se espera que en los próximos días incremente la tarifa de taxi.
A ello se suma la oleada de aumentos en todos los productos derivado de las más recientes reformas hacendarias, con lo cual el panorama no es nada halagador para los bolsillos de los chetumaleños y todos los mexicanos.
En el caso de Othón P. Blanco, el gobierno municipal tiene pendiente por publicar todas las reformas a los reglamentos realizadas en el gobierno anterior y que, en muchos casos son urgentes para resolver problemas de servicios públicos.
Uno de estos es el de transporte urbano, dado que dichas reformas permite flexibilizar los requisitos para participar en la licitación del servicio al no exigir, físicamente, que las empresas que participen presenten sus unidades de transporte.
Ha sido precisamente ese tema el cual no ha permitido que el servicio se preste en forma, dado que los participantes locales no cuentan con el recurso suficiente para poder adquirir las unidades.
Otro asunto pendiente tiene que ver con el alumbrado público y en este caso con la empresa Avances Lumínicos, la cual no concluyó con la colocación de las 25 mil lámparas que prometió.
Con los representantes de esta empresa, informó en su momento el presidente municipal Eduardo Espinoza, se ha tenido reuniones para plantearles una nueva forma de pago, dado que no cuentan con los recursos necesarios para pagar 4 millones de pesos mensuales, además que Avances Lumínicos tampoco ha cumplido.
Se debe informar también si aplicarán sanciones a los ex funcionarios municipales que habrían atracado las arcas municipales, acciones que deben informarse en los primeros quince días del año que inicia.
Como sea el caso es que los pendientes son muchos y en este año el nuevo gobierno municipal debe marcar la diferencia del anterior, el de Carlos Mario Villanueva Tenorio, o si todo quedará en promesas de campaña y declaraciones mediáticas de inicio de administración.
Por otro lado, el gobierno municipal debe atender las demandas de servicios públicos de los asentamientos irregulares los cuales, ya adelantó a finales de año el primer edil, se revisarán con el fin de detener aquellos que no hayan crecido en gran medida.
De momento son tres los asentamientos humanos, pero uno de estos, el que se ubica por la zona mejor conocida como la sabana de Chetumal, tiene menos de tres años y podría negarse cualquier solicitud de cambio de uso de suelo.
Pero además el presidente municipal habló de aplicarle la ley al dirigente de la organización Antorcha Campesina, quien ha organizado a los ciudadanos para ocupar el lugar.
Este tipo de dirigentes, refirió el presidente, solo le “están bajando la lana” a los ciudadanos que requieren de un predio, por lo cual habló de poner orden o, al menos en el caso del gobierno municipal, negarles cualquier permiso.
Estos asentamientos no cuentan con ninguno de los servicios públicos municipales, por lo cual las condiciones en las que viven sus habitantes son insalubres dado que no tienen agua potable, energía eléctrica y menos pavimentación o drenaje.
Si bien es verdad que este tipo de asentamientos solo provocan contaminación al subsuelo porque muchas de las viviendas no cuentan con letrinas, pero aquellas que sí vierten sus desechos directamente al manto freático, lo es también que existen debido a la falta de vivienda o recursos de los ciudadanos para poder acceder a una de interés social.