Bimbo, el bancarizador
El plan fue empezar dando servicios muy simples (venta de tiempo aire) hasta llegar a convertirlos en futuros corresponsales bancarios.
Más de la mitad de las ventas de Bimbo están en cientos de miles de tienditas. Exactamente, 700 mil. Con ellas tiene un contacto diario, directo y en efectivo. Si quería vender más en este canal (el de las grandes tiendas los márgenes de negociación son ajustadísimos), la clave estaba en aumentar el flujo de clientes a estos puntos de venta.
Bimbo analizó a fondo qué hacían las tienditas que vendían más que el promedio: tenían capacitación, estaban tecnificadas y también estaban bancarizadas.
Así surgió la idea hace tres años de comenzar a bancarizar a los demás mostradores. El plan fue empezar dando servicios muy simples (venta de tiempo aire) hasta llegar a convertirlos en futuros corresponsales bancarios capaces de recibir pagos y depósitos de sus clientes.
Bimbo se asoció en partes iguales con Blue Label, la mayor firma sudafricana de telecomunicaciones y especializada en la proveeduría de medios de pagos electrónicos al sector más popular de retail. Se convirtieron en gestores, en intermediarios financieros de las tienditas para que simple y prácticamente, llave en mano, tuvieran su cuenta en Banamex (que les permita contar con fondos para estos servicios de prepago) y una terminal de Visa.
“Nos pusimos entre el banco y las tienditas”, explicó Hortensia Contreras, vicepresidente de Servicios Estratégicos para Grupo Bimbo y CEO de Blue Label México.
Les sumaron otros medios de pago como vales, tarjetas de crédito y débito.
“Hoy estamos en 70 mil tienditas en nuestra red, la Red Qiubo. Ya hay varios miles de millones de pesos que circulan en nuestra plataforma”, abundó Contreras.
Este sistema es similar en su concepto con las terminales Yastás de Compartamos Banco.
Buscan asociarse con algún operador en EU para ofrecer remesas y luego llevarán este sistema a su red de distribuidores en Centro y Sudamérica.
Bimbo y Blue Label se enfocaron en convencer primero y capacitar después a los propietarios de los negocios, “por eso la desarrollamos como una herramienta muy sencilla e intuitiva porque para muchos, la terminal era su primer contacto con la tecnología”, señaló Contreras.
El “brazo bancarizador” de Bimbo cuenta con una fuerza de venta de 600 personas que recorre el país entrenando a los propietarios.
De minioperaciones financieras, como la carga de un celular, se hacen mdd al día.
Twitter: @ba_anderson