Carlos Joaquín y su primer mes
Entre críticas y aplausos, el gobernador no priista Carlos Joaquín González llegó este martes a la marca de su primer mes de gobierno...
Entre críticas y aplausos, el gobernador no priista Carlos Joaquín González llegó este martes a la marca de su primer mes de gobierno, un periodo que ha sido duramente complicado por el desastre financiero y administrativo que heredó de su antecesor, el priista Roberto Borge Angulo.
Encabezando el primer gobierno de alternancia, el político cozumeleño fue el depositario de las esperanzas de cambio de los quintanarroenses, hartos de la voracidad y la soberbia con la que se manejó el PRI en el pasado sexenio, presión adicional que pesa sobre sus hombros porque se espera mucho de él y en tiempo récord.
Las calificaciones de Carlos Joaquín en el arranque de su gobierno son mixtas. En materia política, el gobernador ha dado cátedra con una actuación sobresaliente, ya que de inmediato tomó el control del tablero, sumando a su causa a la actual Legislatura y al mismo Poder Judicial, donde el magistrado presidente Fidel Villanueva Rivero ha hecho hasta lo imposible por congraciarse con él para permanecer en el cargo.
El gobernador sorteó los malos pronósticos de que no tendría garantizada la gobernabilidad porque el PRI con sus aliados conservó la mayoría en el Congreso y en los Ayuntamientos, pero una intervención quirúrgica en el Congreso hizo polvo la presunta mayoría priista, mientras los alcaldes municipales se pusieron casi de inmediato a las órdenes del nuevo mandamás.
Pero no todo ha sido apacible como nuestra bahía de Chetumal, pues Carlos Joaquín ha sido criticado principalmente por algunos nombramientos en su equipo de trabajo, y por imprudentes acciones realizadas sin tacto por ciertos colaboradores.
El peor vendaval que soportó fue por el manoseado tema de la cacería de aviadores, necesaria pero ejecutada de mala manera por el Oficial Mayor, Manuel Alamilla Ceballos, generando una oleada de indignación entre la burocracia especializada y tan ajena a las broncas en la cumbre.
Pero con el fluir de los días las aguas han tomado su nivel. Por orden directa del gobernador en todas las dependencias se está revisando a conciencia las listas de personal para no despedir a ningún trabajador ni afectar a las familias, extirpando tan sólo a los elementos que cobran sin trabajar.
Los agitados vientos del cambio comenzaron a amainar, anticipando un periodo de bonanza en el que Carlos Joaquín trazará el rumbo de su gobierno con la presentación de su plan de trabajo sexenal en los próximos días.