'Compadres', una cinta palomera y adiós mi padre

El primer problema de la cinta es la falta de originalidad, pero no se queda ahí, porque hace uso de una violencia gráfica y simbólica bastante fuera de contexto...

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Qué fácil es recurrir a viejos y funcionales clichés para buscar que el efecto que provocaron originalmente sea reproducido por un público nuevo, pero para desgracia de la gran mayoría que lo han intentado, estos resultan fastidiosos por inimitables. Justo eso es lo que sucede con la cinta “Compadres”, dirigida por Enrique Begné y protagonizada por Omar Chaparro, quien a últimas fechas canta, actúa, conduce, imita… etcétera.

El primer problema de “Compadres” es la falta de originalidad, pero no se queda ahí, porque hace uso de una violencia gráfica y simbólica bastante fuera de contexto, en el supuesto afán de hacer un homenaje a filmes hollywoodenses de acción, situación que a título personal sale sobrando.

Para dejarlo más claro lo inconsistente de esta película es preciso anotar que ha sido sobrevaluada por críticos telenoveleros que la han colocado como la panacea del cine mexicano contemporáneo, es decir, han hablado maravillas de ella. El cine mexicano es ‘basto’ y heterogéneo, en este sentido, no puede ser definido por una película, un director  o un actor.

Recordemos que las comedias mexicanas llenaron de calidad las pantallas de los años de la Segunda Guerra Mundial e hicieron crecer a la cinematografía nacional en fama y fortuna, algunas de las cuales son cintas de acción. La comedia fácil y sin mucho ingenio ha sido la apuesta de las grandes productoras internacionales y México no se ha mantenido al margen de esta situación,

En resumidas cuentas una cinta palomera para los amantes del cine protagonizado por personalidades de la pantalla chica, que dejará mucho que desear al resto del público cinéfilo.

Adiós a mi padre.

El responsable directo de que me apasione el séptimo arte fue mi padre, Jorge Trejo Camacho. Llevando a su primogénito a las matinés del cinema Leandro Valle en la popular Avenida Rojo Gómez de la ciudad de México, mi padre sembró en mí esa semillita del cine. Vio crecer mi pasión por el cine y me apoyó, como apoyó a todo mundo, como apoyó a toda su familia.

El pasado domingo 24 de abril, en medio de grandes muestras de fraternidad y cariño de sus familiares y amigos se fue de este mundo y ha dejado un vació imposible de llenar. Descanse en Paz mi amado padre, mi ejemplo a seguir, mi orgullo. Siempre te recordaremos.  

Solo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected]

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