Cuando la pasión nos gana

Mayweather maneja la distancia larga, la corta, sabe boxear hacia adelante, hacia atrás. Es muy rápido de manos, de pies y de mente.

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Cuando la pasión o el nacionalismo nos embargas nos hace ser viscerales y actuamos sin pensar en la neutralidad. Eso sucedió en el combate donde el moreno Floyd Mayweather le dio una sinfonía de golpes al jalisciense Saúl “Canelo” Álvarez.

En esta columna recogimos comentarios y vaticinios de gente experta y conocedora del deporte de los puños, sin rasgarse las vestiduras, porque se habló con la verdad, sin sentimentalismos. Estuvieron de acuerdo en que todos estaban con el “Canelo”, pero realmente el tapatío nada tenía qué hacer ante Mayweather y, sucedió lo que se esperaba, pues el mexicano recibió una cátedra de boxeo, y como dijera el comentarista de Televisa, Héctor Suárez Gomis, el moreno estadunidense es el que mejor lleva a cabo la frase de “el boxeo es el arte de golpear y no ser golpeado”. Maneja la distancia larga, la corta, sabe boxear hacia adelante, hacia atrás. Es muy rápido de manos, de pies y de mente.

Queda claro que nuestro comentario y el de los entrevistados fue sin apasionamiento, por eso mismo vamos a opinar de José “Barretas” Pinzón.

El del Chembech mostró que cuenta con el cariño de los aficionados, ya que el gimnasio de balonmano del Complejo de la Inalámbrica se vio lleno y durante el combate que le ganó a Alan “Amenaza” Campa unas 7 mil almas coreaban el nombre del mediano yucateco.

Por cierto, el ídolo local es anunciado para ver acción en el Coliseo “Elías Chegwin” de Barranquilla, Colombia, ante Alex “Príncipe” Theran, quien marcha invicto en 15 peleas. El pleito está programado para el 15 de noviembre.

Protesta

En otro tema, no podemos dejar de mencionar la protesta que hizo el excampeón gallo estatal Luis Ruiz Lizarraga ante la Comisión de Boxeo de Mérida. Según la página “Península Deportiva”,  el “Larguirucho” estaba inconforme por el descalabro de su hijo del mismo nombre porque lo declararon perdedor por nócaut técnico ante Carlos “Rabanito” Martín al comenzar el sexto capítulo.

Luis Ruiz aseguró que la herida que ameritó la detención de la confrontación fue producto de un cabezazo en el tercer raund y por eso debieron irse a las tarjetas para una decisión técnica, la cual habría favorecido a su vástago porque en esos momentos iba con buena ventaja sobre “Rabanito”.

Lo extraño del caso es que el presidente de la ComBox, Santiago Basto Mejía, le dijo a Luis Ruiz que en el reglamento de ese organismo no se contempla la decisión técnica ni el no contest (combate nulo). Algo insólito, que causó risa al periodista Juan Carlos Gutiérrez Castillo, porque en todos los reglamentos de México y del mundo existen esas reglas y Mérida no es la excepción.

Alguien escribió en el Facebook, no sabemos si de broma o en serio, que a raíz del empate que dio una juez en la pelea del “Canelo” ante  Mayweather, en Las Vegas, a la de Mérida podían calificarla como la mejor Comisión de Boxeo del mundo.

Es cierto, pero como sugerencia deben ponerse las pilas para que el organismo boxístico meridano recupere el prestigio que se había ganado por muchos años, cuando  imperaba la neutralidad, contaba con jueces calificados, con dirigentes que no se cerraban al diálogo, aceptaban las críticas constructivas y, en verdad, hacían respetar su autonomía.

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