Siempre se ha visto al deporte como un símbolo de salud y esparcimiento social, las instalaciones deportivas son un elemento vital en la comunidad y donde se practica hay menos crímenes; el deporte es siempre una opción sana en las edades tempranas en cualquier estrato social.

En Yucatán no hemos dejado esta actividad en el plano de la agenda política; hay esfuerzos en varias disciplinas por personajes que han dedicado tiempo y recursos para consolidación de sus deportes respectivos y han destacado nacional e internacionalmente. Han creado una industria que genera miles de empleos y la ilusión de destacar para incontables atletas.

Estas personas son:

Jorge Robleda, tenis. Promotor de este deporte, ha sabido mantener el prestigio de la Copa Yucatán en el mundo, su constancia y entusiasmo son un ejemplo de quien ha sabido levantarse y sostener este deporte en innumerables crisis y ha apoyado a otros centros de tenis en la ciudad.

Mario Abraham, boxeo. Heredero de una tradición familiar, ha continuado apostando a deportistas yucatecos y ha promovido y desarrollado gimnasios y estrellas del deporte a nivel internacional.

Arturo Millet, futbol. No sólo ha sido fuerte promotor de los Venados de Yucatán, también ha construido centros de entrenamiento y conformado equipos que hoy siguen luchando en la escena nacional del deporte más popular de México.

Jordi Gené, arco y flecha y tiro al blanco con diábolos. Pionero en estos deportes y entusiasta ciclista, ha promovido e invertido en instalaciones y hoy ofrece estas nuevas actividades a la juventud yucateca. Jordi sabe que ser el primero es difícil, pero también que Yucatán sabe apreciar los nuevos retos y la diversidad.

Pedro Pablo Silveira, velerismo. Empezando de cero, ha promovido desde hace muchos años competencias de veleros y windsurfistas: promotor del deporte marino lucha siempre por entusiasmar a miles en este deporte que ya ha tenido figuras en las olimpiadas.

De los esfuerzos de estos empresarios han salidos deportistas destacados, pero también han cimentado una conexión de la sociedad yucateca a estas actividades sanas que fortifican a la comunidad y que hoy son un baluarte de desarrollo económico y social.

Omití el beisbol porque este deporte tiene una historial especial y le dedicaré un artículo.