Dando seguimiento a lo que comentábamos la semana pasada, es esencial que la estrategia de crecimiento ordenado de la zona metropolitana de Mérida sea guiada por un Plan Integral de Desarrollo Urbano, que necesariamente esté a cargo de un órgano técnico, autónomo y ciudadanizado, que cuente con indicadores de corto, mediano y largo plazos, para evaluar si es necesario reforzar o modificar las políticas del desarrollo urbano. Aspectos importantes en este Plan Integral son:

Acercar la vivienda a los empleos, escuelas y servicios, para reducir las necesidades de transporte, procurando eliminar las regulaciones que impiden la mezcla de usos de suelo compatibles, programando los tiempos de ocupación de los nuevos desarrollos, regulando las distancias máximas de las nuevas áreas de viviendas a escuelas, comercios, clínicas y equipamiento en general; para ello es importante acordar alianzas con los grandes empleadores, con el propósito de acercar la vivienda a los centros de trabajo.

Diseñar una estrategia metropolitana de movilidad eficiente, para conectar a las viviendas con los empleos y los servicios que ofrece la ciudad, conociendo las necesidades de movilidad y planeándola acorde con dichas necesidades, actualizando la normativa de tránsito para darle al peatón la mayor atención, después a los vehículos no motorizados, luego al transporte público y por último al automóvil; un aspecto importante es la normativa para la construcción de conjuntos habitacionales, estableciendo estándares mínimos de infraestructura para peatones y ciclistas, y verificando los requerimientos sobre el número de cajones de estacionamiento y el ancho de calles, definiendo valores máximos y no mínimos.

Dar mejor información a quienes deseen adquirir una vivienda, para que tomen mejores decisiones, ya que es muy frecuente que las personas compren una vivienda sin tener información suficiente de qué es lo que están adquiriendo, particularmente en las implicaciones que tendrá en su vida futura. 

Estas y otras acciones son indispensables para mejorar el futuro de la zona metropolitana de Mérida, hoy día rodeada de desarrollos con un futuro incierto para quienes los habitan; la próxima semana tocaremos otros aspectos.