La lucha contra el narcotráfico en México se agrava cada día y las tensiones entre México y Estados Unidos aumentan en la misma proporción. La desconfianza entre los dos países es el punto central en la falta de coordinación para la lucha contra el crimen organizado.  

Para México los esfuerzos de Washington no son suficientes para detener el tráfico ilícito de armas que alimenta al crimen organizado provenientes de Estados Unidos y, al mismo tiempo, detener la continua demanda de droga por parte de los consumidores norteamericanos. 

Estados Unidos, por su parte, considera que la corrupción ha invadido todas las capas del gobierno mexicano y eso convierte a la guerra contra el narcotráfico en una lucha desigual.

Consecuentemente, las fuerzas antinarcóticos norteamericanas operan en México de manera encubierta y tratando de infiltrar los principales carteles de la droga. Esta actitud operativa es débilmente resistida por las autoridades mexicanas, cuya legislación, impide, por el momento, la presencia militar o policial de Estados Unidos en suelo mexicano. 

Este cuadro de circunstancias se encuentra agravando la complejidad de la lucha contra el narcotráfico encarada por el Presidente Enrique Peña Nieto. La falta de una estrategia de lucha común entre ambos países se encuentra afectando la efectividad de unos y otros. Mientras el principal objetivo de Estados Unidos es evitar que la guerra se extienda a su propio territorio, el de México es aislar al narcotráfico de los proveedores de armas y reducir la capacidad de producción de droga. La diferencia en objetivos se ve reflejada en las tácticas de la guerra. 

Esta incompresible falta de coordinación es aprovechada por el narcotráfico y a la vez genera un escenario donde todos los sectores se ven enfrentados entre sí. La situación refleja un estado de estrategia caótica que no debería continuar.

El episodio del Chapo Guzmán representa un nuevo golpe a la credibilidad del gobierno del presidente Peña Nieto, que comenzó intentando darle un perfil bajo a la lucha contra el crimen, pero el año pasado modificó su estrategia y la colocó de nuevo en la lista de sus prioridades.

Miguel Osorio, que es en la práctica el jefe del gabinete en ausencia del mandatario, de viaje en Francia, de inmediato regreso y convocó a una reunión de emergencia para elaborar la estrategia de búsqueda y captura del Chapo Guzmán.

La fuga del 'Chapo' "va a afectar negativamente la relación con Estados Unidos, que pretendía su extradición", Estaban preocupados por lo peligroso que era y no tenían mucha confianza en que las autoridades mexicanas pudieran impedirle que siguiera operando desde la cárcel".

La fuga de "El Chapo" recuerda la película Fuga de Alcatraz (1979), en la que Frank Lee Morris, protagonizado por Clint Eastwood, consigue huir junto con varios otros reos de la tenebrosa prisión a prueba de fugas de Alcatraz, una pequeña isla rocosa frente a la Bahía de San Francisco, de donde nadie había logrado salir jamás.