Diálogo interior

El diálogo pesimista se manifiesta cuando la persona nunca está satisfecha de los resultados y de su rendimiento.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

No vayas afuera, vuélvete a ti mismo. En el hombre interior habita la verdad.- San Agustín           

El diálogo interior es muy importante. Si es optimista nos infunde una fuerte motivación para lograr nuestros proyectos, en cambio, si el diálogo interior es negativo, con lenguaje derrotista, desmotiva y mina nuestras energías; por eso, es importante aprender a reconocer los propios éxitos, por pequeños que sean, para alimentar la confianza personal.

Hay quienes le temen al éxito, lo perciben como una amenaza, creen no ser capaces de estar a la altura de las circunstancias. Se estresan tanto ante la perspectiva de algún éxito que hacen todo lo posible para autosabotearse haciendo hincapié en sus defectos y demeritando sus aptitudes y capacidades; son muy sensibles a las críticas ajenas; se comparan con los demás en perjuicio propio; buscan la “seguridad ante todo” pues únicamente recuerdan sus “fracasos” sin considerar las veces que sí lo han hecho bien. 

Al estar orgullosos de nuestros éxitos, mantenemos lleno el “banco de felicitaciones” que nos anima a afrontar nuevos desafíos. Cuando pensamos que es posible el éxito, se adopta la fórmula: Éxito + Éxito = Éxito + Éxito… y así sucesivamente.

La fe en ser “ganador (a)” se instala. El diálogo pesimista se manifiesta cuando la persona nunca está satisfecha de los resultados y de su rendimiento. Le obsesionan el miedo y la indecisión; se autocritica despiadadamente, parece escuchar constantemente: “Podrías haberlo hecho mejor”. Se siente incómod@ ante las felicitaciones y cuando las recibe las minimiza diciéndose: “Cualquiera puede hacerlo”. Este diálogo lleva a asumir menos riesgos intentando proteger al ego de errores o fracasos. La fórmula: Fracaso + Fracaso = Fracaso + Fracaso… se instala. 

Si queremos, podemos liberarnos de esa negatividad procurándonos condiciones para estimular el diálogo interior en positivo.

 Algunos puntos que ayudan: 

-Normas de conducta, bien definidas y precisas que propicien la autonomía, cumpliendo con tu responsabilidad para ejercer tus derechos. 
-Estar atent@ a tus pensamientos para evitar ridiculizarte, rebajarte o violentarte.
-Responder con confianza a tus necesidades y aspiraciones cuidando los límites que marcan una sana convivencia. 
-Estar atent@ para recibir y aceptar muestras de atención, afecto y admiración (empezando por ti mism@). 
¡Ser “GANADOR (A)” es posible!

¡Ánimo! hay que aprender a vivir.

Lo más leído

skeleton





skeleton