La educación nos hará libres

La cobertura educativa en el Estado es amplísima. Desde preescolar hasta secundaria, la educación en lengua materna es existente...

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La educación es llave de libertad para las etnias nacionales ante la dominación social, intelectual, psicológica y cultural practicada por centurias. Esto es posible con una educación dirigida a la toma de la conciencia étnica, que permita la formación de seres humanos libres. El enfoque de la educación liberadora y popular de Freire tiene  profundo surco para  sembrar la semilla del desarrollo esperado en las comunidades indígenas. No se trata de suplir la visión indigenista del actual sistema educativo, aplicado en comunidades lingüísticas específicas; se propone modernizarlo con enfoques de comprobado éxito y, ampliarlo a otros niveles.

La cobertura educativa en el Estado es amplísima. Desde preescolar hasta  secundaria, la educación en lengua materna es existente. Desaparece en media superior y es invisible en la superior. Esta situación es  candado difícil de romper para quienes aspiran a la educación en su idioma original. La oferta educativa superior no es intercultural, es completamente alineativa y asimilacionista; el resultado de esta situación es la formación de jóvenes indígenas alejados de su visión de origen.

Lo ideal es que los jóvenes mayas puedan llegar a ser ingenieros, agrónomos, médicos, sociólogos y regresen a sus comunidades de origen; ellos serían agentes de desarrollo en las comunidades mayas. Pero no funciona así, muchos son los jóvenes indígenas peninsulares que aprovechan las oportunidades para educarse; las becas y otras compensaciones a la desigualdad de oportunidades les permiten permanecer en los centros de estudios superiores y graduarse. El título profesional es un pasaporte a la migración, huyen de su origen y hasta niegan su procedencia étnica.

Profesionales mayas, egresados de educación superior (conozco casos) incluso han cambiado sus apellidos para huir de su realidad. Los fenotipos indican que son mayas, pero lo niegan con fervor patrio. Obtener un título es un logro, pero no existe ningún beneficio a la comunidad que lo parió. La conciencia étnica es perdida en los laberintos de la urgencia de ganar dinero. No existe justificación para no poseerlo. Pensar en retornar a donde la pobreza tiene su reino no es agradable.

La educación media y superior debe ser re proyectada desde el enfoque de la  interculturalidad. Coexistimos en una dualidad de culturas mayoritarias, dos lenguas que interactúan para mantener su vigencia, nuestra dualidad divina, dos mundos con visiones diversas. Los indígenas mayas también queremos ejercer el derecho a educarnos desde nuestra forma de entender nuestro cosmos.

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