El ajedrez de las 'teleco' cambia (y no solo Slim)
América Móvil recién contrato a Bank of América para que le ayude a vender parte de sus activos.
Derivado de las reformas correspondientes y atendiendo a dinámicas globales de mercado, en México seremos parte de un fenómeno global: el de empresas de telecomunicaciones ante una nueva repartición del pastel.
América Móvil recién contrato a Bank of América para que le ayude a vender parte de sus activos. Los momios apuntan a que AT&T, ex socio de Carlos Slim por dos décadas, será el comprador, por unos 10 mil mdd, de una parte sustancial de América Móvil y Telmex. Según TeleGeography, AT&T se quedaría en automático con 20.6% de participación de mercado en móviles, 14.2% de internet de banda ancha y casi 20% de telefonía fija. En comparación, hace 12 años, Telefónica compró a Pegaso, y otros operadores pequeños, para quedarse con menos de 15% del mercado de celulares de entonces.
La misma América Móvil se ha estado moviendo afuera. Este año aumentó su presencia en Europa (ya tiene más de 50% de Telekom Austria) y cada que hay una empresa a la venta en el viejo continente, sale a relucir que Slim la busca: sucedió en el caso de Telecom Italia y recientemente con la irlandesa Eircom. En este caso, el viernes pasado el propio director de finanzas Richard Moat, dijo: “No hemos tenido ningún acercamiento con Carlos Slim”.
En esta ronda de eventuales fusiones, también Iusacell y Nextel quieren encontrar comprador, aunque por la forma en que estos negocios se han manejado los últimos años, la tienen más difícil. Si bien Ricardo Salinas ha dicho que “no”, que Iusacell no está a la venta, Telefónica dice que “sí”, que está interesada. Los analistas creen que no hay otra opción para la firma que tienen en copropiedad Tv Azteca y Televisa. Si se vendiera Iusacell, Salinas y Emilio Azcárraga se repartirían unos 6 mil mdd.
Según Gary Kim, analista de Carrier Evolution, “este juego de las sillas” en las telecomunicaciones globales tiene que ver con que las empresas están buscando crecer a toda costa. “Esto es evidente inclusive en casos en el que los operadores buscan desinvertir en ciertas áreas”. En el caso de América Móvil, si bien la empresa no necesariamente busca vender para ampliar su caja (aunque 10 mil mdd no le caerían mal), las presiones regulatoria la empujan a abrir su baraja si bien con una canasta más reducida.